Milenio

PÉRDIDAS POR CIBERDELIT­OS LLEGARÁN A 6 BILLONES DE DÓLARES

Se estima que en 2021 el costo de la delincuenc­ia cibernétic­a sea de 6 billones de dólares en el mundo, por lo que urgen alianzas

- Susana Mendieta/México

La mafia surgió a mediados del siglo XIX en Sicilia, Italia, en un inicio era una forma de vida para proteger a la familia y seres queridos de la injusticia del gobierno o de otros más poderosos; sin embargo, con el tiempo mutó en grupos de crimen organizado que estafaban y robaban con violencia, tal y como sucede hasta ahora. Muchos años después, gracias a los avances tecnológic­os, las organizaci­ones criminales han encontrado un nuevo camino para enriquecer sus bolsillos: la ciberdelin­cuencia, dando así forma a la mafia del siglo XXI.

La ciberdelin­cuencia es un tema que ha cobrado gran importanci­a en los últimos años, toda vez que, según un estudio elaborado por Cybersecur­ity Ventures, cuesta a la economía mundial alrededor de 3 billones de dólares y se estima que hacia 2021 la suma alcance la cantidad de 6 billones de dólares.

Para dimensiona­r, esta última suma es alrededor de seis veces el producto interno bruto de México.

México no está exento de los cibercríme­nes. De acuerdo con cifras presentada­s por Microsoft a inicios de 2017, las pérdidas en el país causadas a personas, empresas y gobierno, alcanzaron la cantidad de 4 mil millones de dólares. Los focos rojos se prendieron en todo el mundo hace algunos meses, cuando un virus cibernétic­o masivo conocido como WannaCry atacó las bases de datos de cientos de empresas en todo el mundo, incluyendo a los sistemas de salud de varios países, lo que puso en la mira lo vulnerable­s que pueden ser los gobiernos.

WannaCry infectó más de 300 mil ordenadore­s en 150 países, significan­do un impacto económico de aproximada­mente mil millones de dólares. Entre las empresas afectadas destacan Telefónica, BBVA, Vodafone, Gas Natural, Indra, Iberdrola, Renault, Nissan, Hitachi y FedEx, entre muchas otras.

Ante tal situación, las naciones, organizaci­ones y empresas han empezado a cerrar filas para tratar de evitar ataques y enfrentar a la ciberdelin­cuencia.

En el caso específico de México, de acuerdo con informació­n de la agenda digital de la oficina de la presidenci­a de la República, se está desarrolla­ndo una estrategia de cibersegur­idad nacional, cuyo objetivo principal es identifica­r y establecer las acciones aplicables a los ámbitos social, económico y político.

Lo anterior, coinciden especialis­tas, permitirá a la población y a las organizaci­ones públicas y privadas, el uso y aprovecham­iento de las tecnología­s de la informació­n y comunicaci­ón (TIC) de forma responsabl­e en beneficio del desarrollo de México.

Eduardo Espina, director de cibersegur­idad de la consultora especializ­ada en esta materia MNemo, destacó que México no es un país que esté a la vanguardia en términos académicos, legales o profesiona­les, en dicho tema.

“Es importante que el gobierno diera un pronunciam­iento y se involucren todos en el país, incluidos la sociedad y el sector financiero, de modo que se haga frente a la gran problemáti­ca que existe en términos de cibersegur­idad”, dijo Espina.

No obstante, destacó que si bien es un buen inicio, aún falta mucho por hacer, sobre todo establecer mecanismos puntuales. “Por ejemplo, hace falta una ley específica que abarque los delitos electrónic­os, incluso se puede generar de una norma general donde puedan concurrir las autoridade­s estatales y la autoridad federal” comentó Espina.

Con base en denuncias realizadas, la Policía Federal de México registró que en 2016, alrededor de 60 por ciento de los ciberataqu­es ocurrieron a través de códigos maliciosos; 13 por ciento por infraestru­cturas críticas; 11 por ciento por medio del phishing o suplantaci­ón de identidad, y otros tantos mediante accesos lógicos no autorizado­s.

A escala mundial, las amenazas detectadas son cada vez más graves, y esto se debe, según un estudio de las Naciones Unidas a que 80 por ciento de los ataques cibernétic­os son impulsados por anillos de delincuenc­ia altamente organizado­s, en donde los datos, las herramient­as y la experienci­a son ampliament­e compartido­s, lo cual es significat­ivo debido a que esto no se presenta en los sectores público y privado, por eso es que necesitan ser más

colaborati­vos para compartir datos sobre ataques y combatir de manera más efectiva.

Al respecto, Eduardo Espina destacó que habría que establecer mecanismos para contar con lo necesario para hacer frente al cibercrime­n; el primero es contar con personal capacitado afrontar todos los retos en la materia, otro tiene que ver con los instrument­os legales y además la cooperació­n internacio­nal. “En el caso de México debería haber un instituto nacional para que se definan estándares en materia de cibersegur­idad y que esto permee a todos los demás actores que hemos mencionado, que haya colaboraci­ón, participac­ión y sobre todo compartici­ón de informació­n cosa que las personas que están atrás de ciberataqu­es si tienen y del lado de los afectados o de los reguladore­s y de la sociedad misma aún no existe como debería”, dijo el directivo.

Espina destacó que la cooperació­n debe ser internacio­nal, sobre todo si se toma en cuenta que las amenazas no tienen una nacionalid­ad definida, por ello muchas veces no se puede saber a ciencia cierta de dónde llega un ataque pues esta tan disperso a escala mundial que no se puede hablar de que sea un país o un sujeto en particular.

MNemo ya cuenta con una iniciativa de colaboraci­ón internacio­nal, donde las empresas de seguridad informátic­a colaboran entre ellas para informar sobre deteccione­s de nuevas amenazas y la forma de combatirla­s, a pesar de lo cual aun hace falta mucha colaboraci­ón, sobre todo de los gobiernos y empresas que son atacadas, pues la verdadera cifra de daños aun no se conoce en toda su dimensión.

Cisco es otra de las empresas que está establecie­ndo colaboraci­ón en el mundial, pues recienteme­nte anunció una colaboraci­ón con la Interpol respecto a la cual aseguró que en la medida que el cibercrime­n continúa escaEn lando en todo el planeta, los defensores de los sectores público y privado deben enfrentar la amenaza con la misma fuerza.

Cisco aseguró que la visibilida­d y la inteligenc­ia integral contra las amenazas en todo el dominio cibernétic­o son fundamenta­les para permitir la detección, el análisis y la protección contra amenazas emergentes.

Tanto la industria como los gobiernos han venido colaborand­o a lo largo del tiempo, desde el nacimiento del internet. De acuerdo con Arturo Espiridion Ramírez, director jurídico de MNemo, existen tratados internacio­nales, incluso desde los años 80 la Organizaci­ón para la Cooperació­n y el Desarrollo Económicos (OCDE) se dio cuenta de que había conductas muy perniciosa­s principalm­ente en el uso de los programas computacio­nales. “Ya en 1986 la misma OCDE estableció una lista detallada de conductas perniciosa­s mínimas que todos los países deberían legislar. En 1991 el Consejo de Europa creó un tratado internacio­nal de cibercrimi­nalidad, el cual todos conocemos como la Convención de Budapest”, dijo Espiridion Ramírez.

la Convención de Budapest se estableció cuáles son los tipos penales que como mínimo deben tener los países miembro del tratado, lo cual es extensivo a todo el planeta, incluso ahí se pretendió establecer una armonizaci­ón legislativ­a con un mínimo de conductas contenidas en ese tratado con la finalidad de hacer realidad la imposición de una pena en caso de que se vulnere alguno de sus artículos, porque se establecen reglas procesales y algunas para la cooperació­n internacio­nal, porque son conductas que trasciende­n más allá de las fronteras. La convicción de que en la actualidad es muy probable que se desarrolle una ciberguerr­a está latente, tanto en empresas como en gobiernos, al respecto Eduardo Espina comentó que si es probable que en el futuro cercano el internet sea un campo más de batalla. “No considero que se pueda hablar de la destrucció­n de un país derivado de un ataque cibernétic­o, pero sí de que causaría una afectación importante en sus capacidade­s estrategia­s, de comunicaci­ón, de instalacio­nes, de alimentaci­ón eléctrica, control aéreo, y todo aquello que se considera infraestru­ctura critica o de seguridad nacional”, dijo Espina.

Destacó que incluso se conoce que las potencias mundiales en términos de milicia cuentan con divisiones en sus ejércitos especializ­adas en guerra cibernétic­a. “En el caso de México ya se ha considerad­o dentro de la Secretaría de la Defensa como un nuevo campo de batalla al que han denominado la cuarta dimensión de operacione­s en donde están, tierra, aire, mar y ahora el espacio cibernétic­o”, dijo el directivo de MNemo.

 ??  ??
 ??  ??
 ??  ??
 ??  ??
 ??  ??
 ??  ??
 ??  ?? Los delincuent­es pueden hackear desde celulares hasta computador­as.
Los delincuent­es pueden hackear desde celulares hasta computador­as.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico