“En ópera, la voz es el verdadero pasaporte”
La cantante recibe la Medalla Alfonso Ortiz Tirado en reconocimiento a su trayectoria
“En el país hay mucho talento, pero no tantos foros como las voces mexicanas necesitan”
En el mundo de la ópera no existen las nacionalidades, afirmó en conferencia de prensa la soprano Rebeca Olvera, poco antes de recibir la Medalla Alfonso Ortiz Tirado 2018 por su trayectoria artística. Así lo ha constatado la intérprete que, tras estudiar Ciencias de la Comunicación, se decidió por el canto.
La soprano poblana señaló que un director de ópera “no te pide tu pasaporte. Cuando vas a hacer una audición o un concierto, tu carta de presentación es tu voz”.
Desde hace varios años se ganó su lugar como solista de la Casa de Ópera de Zúrich. Advirtió que recibir el galardón implica “un honor y una responsabilidad. Es un gran estímulo para hacer mejor las cosas e ir todavía más lejos. Me siento muy halagada”.
Sobre la competitividad de los cantantes nacionales, Olvera dijo que hay algo “muy especial en las voces masculinas mexicanas, que no se da en ninguna parte del mundo. Respecto a las femeninas, debo decir que hay una calidad impresionante en el mundo. Con toda honestidad, cuando salí de México llegué a Suiza muy sácale punta porque me había ido muy bien: acababa de ganar un concurso y había hecho mi debut”.
Pero en Suiza constató que “el nivel mundial de las cantantes, sobre todo las sopranos, es impresionante. Hay cada rusa, cada italiana con voces increíbles y, que, además, tienen una formación fuerte y profunda. Le eché el doble de ganas porque me di cuenta de que yo no era nada especial, que era una del montón. Eso me hizo redoblar los esfuerzos, ponerme a estudiar y a reforzar mi técnica vocal. Afortunadamente he logrado sobresalir con mucho esfuerzo”.
Dijo que la labor de una cantante de ópera es “contar historias de amor y desamor. ¡Será porque tengo mucha imaginación! A todos los personajes les tengo cariño, algunos por la complejidad de su carácter en una historia determinada, que puede ser muy dramático, o por la musicalidad y sus exigencias técnicas”.
Ha desempeñado muchos personajes: “Me ha tocado hacer Wagner, Puccini y música contemporánea, y absolutamente todo tiene su encanto. Me gusta la idea de que una historia se pueda contar de muchas maneras porque no importa en dónde se desarrolla, sino cuál es el meollo del asunto. Si cuentas algo sobre una traición, puede suceder en México o en cualquier parte, en la Edad Media o en el futuro”.
Olvera dijo que en México “existe mucho talento, pero lamentablemente no hay tantos foros como las voces mexicanas necesitan. Por eso estoy tan feliz de estar en este festival, que le da espacio a las voces mexicanas. También es cierto que hemos mejorado bastante desde que yo me fui: hay muchísimas compañías pequeñas en los estados haciendo cosas. Vamos por un buen camino”.
David Hernández Bretón, director de la Sinfónica de Sonora, dijo que ensayaron con Olvera y “estábamos extasiados de oír a una cantante de este nivel, una de las más grandes que hay en el escenario operístico internacional, con gran un rango dinámico y una línea de canto de primer mundo”. m