Programa Pauta, semillero de vocaciones científicas
Un calentador solar hecho con materiales reciclables, una molécula antioxidante para atrapar radicales libres, un purificador de agua de lluvia, una diadema contra los movimientos involuntarios que causa el mal de Parkinson y una simulación de los patrones de vibración de esa enfermedad, son desarrollados por niñas, niños y jóvenes de nueve a 17 años de edad en los talleres del Programa Adopte un Talento (PAUTA).
Desde noviembre de 2007, este proyecto, ideado y desarrollado por un grupo de científicos y educadores del Instituto de Ciencias Nucleares (ICN), el Instituto de Biotecnología (IBt) y la Dirección General de Divulgación de la Ciencia (DGDC) de la UNAM, acompaña a estudiantes con interés y habilidades para la ciencia, desde preescolar hasta preparatoria. Actualmente cuenta con mil 557 estudiantes en sus sedes de la Ciudad de México, Chiapas, Morelos y Michoacán.
En conferencia de medios realizada en el ICN, Miguel Alcubierre Moya, director de esa entidad, señaló que desde sus orígenes PAUTA ha beneficiado y dado seguimiento a más de 10 mil pequeños, quienes han desarrollado alrededor de mil 300 proyectos con impacto social en sus comunidades. Cuentan con la asesoría de casi 400 científicos de diversas instituciones, quienes fungen como mentores en programas de vinculación.
“PAUTA significa para los niños tener una oportunidad”, resumió uno de los fundadores del proyecto, el investigador emérito del ICN y actual coordinador del Centro de Ciencias de la Complejidad (C3), Alejandro Frank Hoeflich.