Milenio

ES EL AS DEL PIOJO

EL COLOMBIANO MATEUS URIBE SE DESTACA EN LA LIGA ENTRE LOS MEDIOCAMPI­STAS MÁS COMPLETOS; EN AMÉRICA, ES UN INSUSTITUI­BLE PARA EL QUE MIGUEL HERRERA NO SE RESERVA ELOGIOS

- Higinio Robles León/ Ciudad de México LA

Hay jugadores a los que se les puede dar la etiqueta de todo terreno, tipos que cumplen con sus tareas asignadas, pero que dan un plus y ayudan en otras facetas. Lo agradece el cuerpo técnico y el resto del grupo, porque surgen como solución a distintas situacione­s. Así es Mateus Uribe, el mediocampi­sta colombiano que ejerció de abrelatas contra León, ante el que logró su segundo doblete del torneo.

Uribe se ha convertido en pieza fundamenta­l para Miguel Herrera. Mateus es el mediocampi­sta mixto, el que se suelta y fluye hacia atrás y hacia delante, por él pasa mucho del juego de las Águilas y cuando se ha requerido que ocupe la plaza de volante, por ausencia de Renato Ibarra, ha entregado sus mejores cuentas.

Los cuatro goles que ha marcado el colombiano lo convierten en el mediocampi­sta más goleador de la Liga Mx. Un jugador capaz de cambiar el curso de un partido, por esa capacidad de llegar al área desde la segunda línea, pero también, con un disparo de media distancia que toma por sorpresa a los rivales.

No hay en la Liga otro centrocamp­ista con ese aporte goleador, el resto de equipos poseen jugadores de buen pedigrí en esa demarcació­n, pero ninguno del que exhibe el colombiano. Hay otros más rocosos que priorizan las tareas defensivas y unos más que se suman al ataque, pero el sentido con el que lo hace Mateus es punto y aparte.

Para muestra, el timing que tuvo en el duelo contra La Fiera en los dos goles que anotó. En el primero, acompañó la acción de Jérémy Ménez, el francés tiró raso, pero William Yarbrough detuvo su tiro, aunque el portero dejó muerta la bola y Mateus, que estaba cerca, le pegó con la zurda y la puso pegada al palo. Puro instinto, porque jugando como volante por derecha llegó hasta la posición de nueve.

Y en el segundo, mostró su buen golpeo de pelota, apenas recibió de Paul Aguilar ya tenía claro que debía soltar la pierna derecha, el resultado fue una raya que sorprendió al portero leonés y puso la bola en la escuadra. Apagó de golpe y porrazo cualquier intento de León por rescatar unidades en el Azteca.

Uribe ya suma un gol más que el curso pasado, sin duda se ha convertido en el fichaje con mejor rendimient­o en la nueva gestión de Miguel Herrera, un futbolista por el que pujaron hasta el final. Él puso de su parte para fichar con las Águilas, pues se rehusó a entrenar por la negativa de Atlético Nacional en las negociacio­nes con la directiva americanis­ta. Incluso apareció Tigres, pero los felinos se bajaron de la mesa y fue cuando los de Coapa apretaron por sus servicios y lo ficharon.

Y es que la directiva azulcrema tenía claro que Mateus cuenta con el código genético ideal del mediocampi­sta: buen posicionam­iento, lectura de juego, labores de recuperaci­ón a la par de las de construcci­ón de juego, además de potencia para llegar y precisión para definir.

Es cierto que le costó tomar el puesto, por el tema de adaptación y por una lesión en la espalda que le tumbó varias semanas, pero cuando apareció en la foto de arranque ya no se bajó más, relegó a un plano secundario a William da Silva y a Edson Álvarez. En el actual torneo ha ocurrido lo mismo, su compenetra­ción con Guido Rodríguez los ha hecho la pareja estelar del Piojo en el centro del campo.

No se concibe el medio campo de América sin Mateus Uribe, este torneo solo se ha perdido dos partidos, uno por suspensión y otro por decisión del cuerpo técnico. El primero fue contra Atlas, luego de salir expulsado en el juego contra Pumas, cuando en un intento de chilena acabó golpeando a Nicolás Castillo, aunque la directiva apeló en dos ocasiones la sanción, no logró que le retiraran el castigo.

El segundo fue contra Tijuana, en la Jornada 9, el Piojo le dio descanso porque tenía cuatro amarillas y corría el riesgo de que con una amonestaci­ón más, no jugara el Clásico Nacional y la prioridad del cuerpo técnico era contar con él en el duelo contra Chivas. Y es que de no ser por esas situacione­s o por enfermedad, no se le verá fuera del once, porque su aporte es crucial en estos días.

Sus compañeros y el propio cuerpo técnico resaltan sus condicione­s. “La verdad que Mateus está haciendo un trabajo excepciona­l, estamos muy contentos, es lindo tener compañeros así, que dejan todo en la cancha en cada partido, eso es contagioso”, dijo Agustín Marchesín sobre el desempeño de Uribe.

“Para mí es un gran jugador, para eso lo trajimos, trae un nivel muy bueno. Qué bueno por nosotros, es un gran jugador”, señaló Miguel Herrera sobre su futbolista.

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Mateus Uribe celebra uno de sus goles del pasado sábado

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