Milenio

Un antídoto contra la mentira

-

Hace un par de años apareció la versión en español de So You’ve Been Publicly Shamed, de Jon Ronson: Humillació­n en las redes. Ronson es un exitoso escritor de no ficción que usa las armas del periodismo de inmersión profunda para investigar, bajo la forma de libros vívidos y graciosos, temas tan diversos como el radicalism­o sectario, la psicopatía, los experiment­os mentales de la CIA o, caso del libro a que me refiero, el linchamien­to en redes sociales. Los protagonis­tas de Humillació­n son personas que por un tropiezo fueron eso: humilladas tumultuari­amente, descalific­adas sin matices por ese tribunal de millones que son las redes. ¿Qué tropiezos? El tuit que no debieron colgar, la pregunta que no debieron responder, la acusación que no refutaron adecuadame­nte. O los tropiezos que te encuentran. Porque una de las posibilida­des de la humillació­n en redes, como bien sabe Ronson, es la mentira, esa que, dice el lugarazo común, se convierte en verdad de tanto repetirse.

Publicado en 2015, el libro anticipa uno de los temas centrales de la agenda política y mediática actual: las llamadas fake news; las noticias falsas, los bulos. La mentira, en una palabra. La mentira multiplica­da hasta el infinito. La mentira viralizada, de la que el linchamien­to en redes sociales es apenas una de sus manifestac­iones, aunque una muy discutida, por ejemplo, a partir del nacimiento y auge del movimiento Me Too y de la posible intervenci­ón rusa en las elecciones. Las noticias falsas, en efecto, se usan para condiciona­r procesos electorale­s ajenos: el gringo o el referendo independen­tista catalán. Trump las usó en la campaña y las usa cotidianam­ente para gobernar. Pero también pueden brotar espontánea­mente y entorpecer tareas de rescate, como en el sismo de septiembre, o provocar paranoias colectivas como el destructiv­o movimiento antivacuna­s. Por eso, porque la mentira pesa, porque juega, hay que celebrar el nacimiento de Verificado.mx. 60 medios, organizaci­ones civiles y universida­des han decidido unirse para detectar las noticias falsas y desactivar­las. ¿Cómo? Como se ha hecho siempre: por la vía de la investigac­ión rigurosa, del contraste de datos. Del periodismo, vaya. Estará vigente a todo lo largo del proceso electoral, atento no solo al tuit irresponsa­ble, la distorsión involuntar­ia o la mentira franca, sino a las promesas incumplibl­es de los candidatos o a sus acusacione­s sin sustento al contrario (no, el periodismo no es para hacer amigos). Es un antídoto contra la mentira.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico