Enamora André Rieu al Auditorio con su música
Frente a un Auditorio Nacional lleno a tope, André Rieu hizo gala de cada una de sus facetas artísticas, violinista, director de orquesta y compositor, además probó su poder de atraer a niños que maravillados aplaudían después de cada pieza que entregó ayer el neerlandés, que pudo presentarse al fin, luego de tener que posponer su recital por el 19-S.
El de André es un recital que fusiona el tempo y virtuosismo del género clásico con el humor que proviene en gran medida de los integrantes de la Johann Strauss Orchestra, al simular que eran patinadores en “Schlittschuhlaufen” o cuando con un mazazo en la cabeza un flautista fue interrumpido, cuando quiso más protagonismo del que debía.
En esta oportunidad, Rieu celebró tres décadas de su primer ensayo con la Johann Strauss Orchestra, en el colegio de sus hijos y sin calefacción, así como el concierto número 20 en Ciudad de México, para festejar armó un recital que incluyó a representantes de la música del mundo, como los Platin Tenors que alzaron la voz en honor a Puccini con “Nessun Dorma”. “La música no necesita palabras va directo al corazón y es capaz de unir a tanta gente, como lo vemos cada noche alrededor del mundo”, expresó Rieu, quien compartió su escenario con las sopranos chinas Ling Shao y Li Jing, que conmovieron con su interpretación de “Plaisir d’Amour” y “Shanghai Tang”; esto al cierre de esta edición, cuando se producía el primer intermedio de la velada.