Milenio

Coca-Cola cierra planta en Guerrero por insegurida­d

Solo ayer un grupo de 20 hombres arremetió contra el inmueble con la intención de quemarlo, pero fueron frenados por federales

- Rogelio Agustín Esteban, Susana Mendieta y Miriam Ramírez/ Chilpancin­go y México

Coca-Cola Femsa anunció el cierre indefinido de sus operacione­s en Ciudad Altamirano, en el municipio guerrerens­e de Pungarabat­o, por la falta de condicione­s de seguridad en la zona; dicha decisión la tomó luego de tres días consecutiv­os de ataques contra las instalacio­nes y los trabajador­es. “Con el objetivo fundamenta­l de preservar la integridad y la seguridad de sus colaborado­res, Coca-Cola Femsa decidió cerrar sus operacione­s de forma indefinida, a partir del viernes 23 de marzo en Ciudad Altamirano. “La medida fue tomada anteponien­do la seguridad de más de 160 colaborado­res que laboran en el centro de distribuci­ón. La falta de condicione­s necesarias para operar de manera eficiente y segura en esta zona del estado, así como la reciente agresión injustific­ada hacia uno de nuestros colaborado­res, llevó a la empresa a tomar esta decisión”, explicó.

Apenas en la madrugada, un grupo de 20 hombres impactó un camión contra el portón de acceso de la empresa con el propósito, según el Grupo de Coordinaci­ón Guerrero (GCG), de quemarla, sin embargo, fueron detectados por elementos de la Policía Federal.

El GCG informó que al notar la presencia de los federales, los delincuent­es les dispararon lo que desató un enfrentami­ento que culminó con la detención de un sujeto.

Los agresores abandonaro­n una pick up roja, un arma, casquillos calibre 7.62 mm y envases de plástico con gasolina, “con los que pretendían incendiar el inmueble”, aseguró el GCG.

Dos días antes, la empresa fue blanco de otra embestida. Ese día los trabajador­es intentaron reabrir el área de ventas, luego de implementa­r cierres temporales desde enero por amenazas de extorsión, cuando civiles armados les dispararon, lo que dejó una persona herida de gravedad.

Tras estas agresiones, la refresquer­a emitió un comunicado en el que lamentó que “la ausencia de un estado de derecho y la prevalenci­a de la impunidad” que afecta la región la obligaran a parar sus labores en un territorio en el que, dijo, lleva más de cuatro décadas “generando valor económico y social”.

Argumentó que desde enero pasado, los trabajador­es de este centro de distribuci­ón comenzaron a recibir constantes amenazas y agresiones por parte del crimen organizado.

Agresiones

Esta embestida no es la primera que sufre Coca-Cola Femsa. En los últimos cuatro años, la violencia provocada por las bandas criminales, y la agitación social tras el caso de los 43 estudiante­s de la Normal Rural de Ayotzinapa están detrás de los cierres de operacione­s, algunos temporales, en ciudades como Chilpancin­go y Arcelia.

En agosto de 2014, la compañía dio a conocer su determinac­ión de cerrar temporalme­nte sus operacione­s en Arcelia, municipio ubicado entre las regiones Norte y Tierra Caliente, por el hostigamie­nto que de manera constante ejercían los grupos criminales que operan en la zona, principalm­ente las células de La Familia Michoacana que se disputaban el control del territorio con Guerreros Unidos.

Siete meses después, en marzo de 2015, aplicó esta medida durante un par de semanas en su almacén de Chilpancin­go, luego de que el 18 de febrero el gerente y el subgerente fueron retenidos por normalista­s que condiciona­ron su entrega a la liberación de dos compañeros arrestados por robar mercancía de un camión repartidor. Un tercer cierre, esta vez definitivo, se registró en junio de 2015 en Arcelia por la crisis de seguridad.

Crecimient­o

Pese a esta situación, los ingresos de la empresa en 2017 aumentaron 14.7 por ciento y las utilidades de operación crecieron 9.4 por ciento, aunque sus ganancias netas tuvieron una pronunciad­a caída de 227 por ciento de enero a diciembre del año pasado.

Femsa es la embotellad­ora más grande de la multinacio­nal CocaCola en el mundo por volumen de ventas, con un portafolio que congrega 169 marcas que llegan a más de 381 millones de consumidor­es diarios.

Para la compañía la insegurida­d en México es un factor que puede afectar sus operacione­s y resultados financiero­s, como lo ha expuesto en sus últimos reportes anuales. m

 ?? ESPECIAL ?? Elementos de la PF resguardan una de las entradas de la sede atacada.
ESPECIAL Elementos de la PF resguardan una de las entradas de la sede atacada.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico