Samsung responde a crisis con reestructura
Incorpora a una mujer a su máximo órgano de gobierno, la segunda en 49 años, y eleva de nueve a 11 el número de miembros
Samsung Electronics reestructuró su consejo de administración para mejorar la gobernanza y la toma de decisiones después de un año tumultuoso marcado por el escándalo.
El viernes, el grupo de tecnología global nombró para el consejo de administración a Kim Sun-uk, apenas la segunda mujer que forma parte del órgano de gobierno en sus 49 años de historia. Samsung también separó la función de presidente de la tarea del director ejecutivo y aumentó el número de miembros de nueve a 11.
Miembros femeninos en los consejos de administración no son habituales en el sector corporativo de Corea.
Los cambios buscan mejorar el poder y la independencia del consejo en una compañía a la que habitualmente se le critica por su administración “estilo emperador” y la firme influencia de la familia Lee, fundadora de la compañía.
Como la compañía más grande de Corea del Sur, que representa alrededor de un cuarto del valor del cuadro principal del mercado de valores del país, Samsung es una pieza crucial de la economía de la nación.
Pero el grupo recibió fuertes críticas el año pasado después de que Lee Jae-yong, el jefe de facto de la compañía, quedó atrapado en un escándalo de corrupción y tráfico de influencias que llevó a la salida de la ex presidenta de Corea del Sur, Park Geun-hye.
En agosto, un tribunal senten- ció a Lee a cinco años de prisión, aunque un juez de apelaciones el mes pasado redujo la condena a la mitad y después la suspendió, con lo que Lee pudo salir libre.
El heredero natural de la compañía, de 49 años de edad, no estuvo presente en la reunión anual del viernes en la que se anunciaron los cambios en el consejo de administración. “Creo que este es el momento adecuado para que un liderazgo más joven tome el mando de la compañía para responder mejor a una industria global de tecnología de la información que cambia rápidamente”, dijo Kwon Oh-hyun, el presidente saliente del consejo.
La edad promedio del nuevo consejo de administración de Samsung es de 60 años. “La separación de las funciones de presidente y director ejecutivo le darán más poder al consejo de directores y mejorará su indepen- dencia. El consejo de administración podrá evaluar el desempeño de la compañía de manera más objetiva y tener una mayor autoridad y eficiencia como un órgano de toma de decisiones”, dijo Kwon, quien anunció su jubilación en octubre mientras citó “una crisis sin precedentes” en la compañía.
Kim trabajó como profesora de derecho de Ewha Womans University y asesoró al tribunal constitucional de Corea del Sur.
Sin embargo, los analistas se apresuraron a echar un balde de agua fría sobre la reestructuración, al decir que la continua presencia de Lee socavó los cambios. “Es difícil esperar grandes cambios con un nuevo consejo de administración... no creo que podamos llamarle la reorganización de personal que los accionistas quieren”, dijo Chung Sun-seop, jefe del grupo de análisis corporativo Chaebul.com.
“Le resultará difícil a Samsung obtener el apoyo público para la decisión de Lee Jae-yong de permanecer como director del consejo a pesar de que lo declararon culpable por soborno”.
Park Ju-geun, director del regulador CEO Score, quien secundó el sentimiento, dijo: “Samsung no puede declarar una gestión transparente mientras Lee se mantenga en el consejo de administración”.
A pesar de que se suspendió su sentencia el mes pasado, Lee mantiene una condena por sobornos con valor de más de 3 millones de dólares a un alto asesor presidencial.
La corte suprema emitirá un veredicto final a finales de este año. “Gracias por todo lo que han hecho por Corea del Sur. Pero... todavía hay informes sobre sus relaciones corruptas con el gobierno”, dijo un accionista en la reunión del viernes. “Espero que no tenga que mencionar esto otra vez”. mil millones de libras. Si bien la compra de la operación de Pfizer le habría generado saludables flujos de efectivo es probable que habría significado un menor enfoque en el desarrollo de proyectos de nuevos medicamentos.
Algunos inversionista también estaban preocupados de que una adquisición de ese tamaño pusiera en peligro los dividendos de GSK.
Los analistas de Investec dijeron que aunque se sentían “cómodos” de que el dividendo se podría sostener a su nivel actual de 80 peniques incluso si GSK hubiera adquirido tanto la unidad de Pfizer como la participación en una empresa conjunta de consumo que tienen con Novartis y que actualmente no poseen”.