Será su última vez en el Jalisco
Delantero de Chivas
Nos acostumbramos a que siempre estaba, que parece eterno, que nunca se va a retirar. Carlos Arnoldo Salcido Flores está en el último tramo de su carrera, lo hace jugando una final continental y el viernes tendrá la oportunidad de pisar por última vez la grama del Jalisco.
Debutó en aquel lejano 22 de julio en el coloso de la calzada Independencia ante La Piedad, era domingo y hacía sol; hoy, 17 años después, el Choco está por colgar los botines tras una prolífica carrera y paradójicamente uno de sus últimos partidos será en la que fue su casa, en la cancha de las añoranzas, en el estadio que lo catapultó a triunfar en Europa.
De Ocotlán a Eindhoven sabían de su potencial y para llegar no le fue fácil a este hombre, ya que cuenta sin pena, que hubo días que no había para el camión, pero llegaba a entrenar, nunca perdió la fe ni bajó la guardia. Este viernes, Salcido saldrá a la cancha a defender los colores de Chivas, pero sabe que será la última vez que llegue al Jalisco como jugador.
Salcido volvió de su aventura europea para ganar dos títulos con Tigres, pero le faltaba algo, salir en la foto como Oswaldo o como Coyote o como Quirarte, Salcido quería levantar el campeonato de Liga y después partir a su escuela en Ocotlán.
Pero se quedó un año más, dos semestres de más malas que buenas, donde la misma gente del Rebaño lo criticó al extremo, pero el futbol da revanchas y ahora, como capitán del equipo tendrá otra final internacional, la primera desde 2010 cuando Chivas jugó contra el Inter de Porto Alegre, fechas en las que Salcido aún estaba lejos de volver.
“Estaría muy bien irme ganando un título más”, dijo el Choco en los últimos días y ahora tendrá un clásico más ante el Atlas, el más pasional.
Se va un ídolo, una leyenda rojiblanca. El adiós de Salcido será en casa ante León, pero la última vez que juegue en el Jalisco será este viernes. Él parecía eterno, siempre salvaba la defensa del Rebaño, pero el tiempo del fin llegó. Carlos Salcido se va y el mejor marco que puede tener es el Jalisco lleno, de gala, como en sus mejores tardes, como cuando debutaba y soñaba con ir a Europa.