El Premio LIPP se abre a todas las novedades
Luego de que en sus primeras seis ediciones el Premio LIPP La Brasserie de Novela estuviera enfocado en la primera o segunda obra de un autor joven, ahora se abre a todos los manuscritos que hayan sido aceptados por las editoriales para ser publicadas, según anunció Alberto Chimal, quien asumió la presidencia del jurado del concurso en su versión de este año. “Una de las características del premio es que se dirige a novelas ya aceptadas por las editoriales, próximas a publicar; pero, con una modificación de las reglas estipuladas en la convocatoria, se abre a cualquier novela, cuando en años anteriores se establecía que fueran primeras o segundas, sin importar lo corta o extensa que sea la trayectoria del autor”, enfatizó Chimal durante la presentación de la edición de este año.
El 31 de julio cierra la convocatoria, con la intención de emitir el fallo el 3 de octubre. La premiación se realizará en la Feria Internacional de Guadalajara, cuyo monto económico consiste en 100 mil pesos, otorgados por LIPP Brasserie y la Secretaría de Cultura. “Me gusta mucho la oportunidad de estar como presidente del jurado, porque me parece que el reconocimiento es muy particular, no solo por los detalles de sus bases, sino porque a lo largo de sus seis ediciones pasadas se ha consolidado como un galardón que se da a novelas que no siempre son las que están de moda o en el radar de las novedades”, destacó Chimal, acompañado por Ana García Bergua y Eduardo Antonio Parra, también miembros del jurado.
Es un premio similar al que se otorga con el mismo nombre en París desde 1935, Le Prix Cazes Brasserie LIPP, que busca estimular la creación literaria, aunque en el caso mexicano está dirigido a editoriales que ya hayan aceptado la publicación de un libro. En este caso, las casas editoras son las encargadas de las postulaciones. m