¿El fin del #amlove?
No es nuevo para nadie que mediana- mente siga estas cosas, desde hace algunos años, que hay un grupo de empresarios en el país que detesta a Andrés Manuel López Obrador.
No es nuevo para nadie que Andrés Manuel López Obrador detesta a un grupo de empresarios a los que se refiere con nombre y apellido desde hace muchos años.
Lo que sí me parece novedoso es lo público de la bronca que estamos viendo en los últimos días. Ya vendrá algún historiador a precisar qué y cuándo arrancó esto, quién dijo en estos días qué, pero creo que pone la elección en un tono que a nadie conviene.
Una cosa es la polarización en redes y otra cosa son desplegados y aseveraciones como las que vimos esta semana que termina.
Ayer, después del desplegado de los empresarios respondiendo a la acusación de López Obrador de que había reuniones para presionar a la declinación de varios candidatos a favor de uno que compitiera con él, López Obrador se fue a la yugular.
“Yo lo que pienso es que le han hecho mucho daño al país porque ellos son responsables de la tragedia nacional en buena medida, es el grupo que se opone a que haya un cambio porque les ha ido muy bien a ellos, le ha ido muy mal al pueblo pero a ellos les ha ido muy bien y por eso no quieren que haya un cambio de régimen y para ser claros no quieren dejar de robar y no quieren perder el privilegio de mandar porque no solo es hacer negocios al amparo del poder público como lo han hecho, sino que se sienten los dueños de México, ellos tienen confiscadas las instituciones, tienen secuestrado al gobierno...
“¿…que son una mafia del poder?, lo son; ¿que se han beneficiado del poder?, sin duda; ¿que son responsables de la crisis de México?, desde luego; que son también responsables de un problema muy grave que nos afecta a todos: de la inseguridad y la violencia porque se han dedicado a saquear, activar y se abandonó al pueblo y se le canceló el futuro a millones de mexicanos y ahora todos estamos pagando las consecuencias”.
Vendrán en estos días cualquier tipo de defensas de uno y otro lado. Vendrán análisis de las consecuencias de lo duro de las palabras de ambos lados.
De botepronto: los empresarios son empresarios, sus responsabilidades tienen que ver con sus socios, sus empleados, sus utilidades, sus productos o servicios y el cumplimiento de la ley, y si se les pega la gana, alguna responsabilidad social.
Si Andrés Manuel es presidente, lo será de todos. Incluidos los que ayer llamó como llamó. M