Dedicado al llanero
El futbol no inició como lo conocemos hoy. Todo tiene un origen y el del balompié fue en los campos que en lugar de pasto tenían tierra y donde, en el caso de México, se le imprimió un sello especial con nuestro folclor.
Todo esto y más es lo que Federico Fernández Christlieb, retrata en su nuevo libro, Todo lo que sabemos. Cancha, itinerario y cultura. En la sinopsis, el geógrafo y maestro en historia por la UNAM describe al futbol llanero como una actividad similar al culto religioso y como la cura de todos los males, discurso que retomó en la presentación de la obra.
“El futbol es como un catalizador que permite que las amistades se solidifiquen. Esto es lo que platico en mi libro, cómo el futbol puede intervenir en todo tipo de relaciones del ser humano y lo titulé en plural porque el futbol es un deporte colectivo. Yo quería hablar en general del deporte, pero desde hace muchos años existen esos libros; sin embargo, no tienen esa esencia del futbol, hablan de táctica, pero no de futbol y es lo que yo hice”, dijo Federico, quien jugó mucho tiempo en el Sahara FC del Ajusco, equipo en el que ocasionalmente tiene actividad y al que ha impulsado a seguir haciendo historia con nuevos talentos.
Su hermano Félix Fernández, ex portero del Atlante y convocado al Tri para el Mundial de 1994 y para las eliminatorias de Francia 1998, ofreció unas palabras.
“El futbol llanero no ha cambiado, en comparación con el profesional, porque sigue siendo original y auténtico. Aún se juega el clásico 4-3-3, vemos que el portero despeja como a miles de kilómetros de distancia y al terminar el partido no puede faltar la chela. Estuve 17 años como profesional y puedo decir que mi hermano ha jugado más que yo, involucrando costumbres y tradiciones”.