Maternidad no frena el emprendedurismo
Aires del Campo y Kichink son ejemplos de empresas exitosas dirigidas por mujeres
Guadalupe Latapí y Claudia de Heredia, fundadoras de Aires del Campo —empresa que en 2017 tuvo ingresos por casi 200 millones de pesos— y de Kichink —300 millones de pesos—, afirmaron que sus empresas son claros ejemplos de empoderamiento femenino. “Más allá de los recursos económicos y de si seas mujer u hombre, es fundamental tener un buen plan de negocio”, afirmó, en entrevista con MILENIO, Latapí, la fundadora de la empresa dedicada a la comercialización y distribución de productos orgánicos en México.
De acuerdo con datos del Inegi, en 2016 el trabajo en las tareas domésticas y de cuidados que realiza cada mujer equivalió a contribuir con 51 mil 962 pesos anuales, mientras que por cada hombre que realiza estas labores es de 18 mil 943 pesos por el mismo periodo.
En tanto, el estudio En búsqueda de la igualdad de género, de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) de 2017, en México 17.8 por ciento de los hombres ocupados y 8.9 de mujeres trabajan 60 horas o más cada semana. En contraste, el promedio de la OCDE es de 7.9 por cierto para hombres y 3.1 para mujeres.
Al respecto, el economista del Banco de Desarrollo Interamericano, David Kaplan, opinó que tal vez un adulto en una familia con hijos pueda estar en la oficina hasta las 10 de la noche, pero alguien tendrá que ocuparse de los hijos.
“En la práctica, la probabilidad es muy alta de que sea la mujer quien sacrifique su carrera profesional ante la imposibilidad de que la mamá y el papá tengan horarios laborales intensivos”, expresó.
En esa línea, Claudia de Heredia, fundadora de Kichink, la empresa de comercio electrónico de prendas y artículos de diseño independiente, afirmó que es
“Más allá de recursos económicos, lo más importante para crecer es el plan de negocios”
vital el apoyo de una red de personas para compaginar —es su caso— la maternidad y el ámbito empresarial.
Kichink tiene 120 colaboradores y más de 100 mil proveedores que ofrecen sus productos a través de la plataforma; de este último ramo derivan empleos indirectos que no son en línea, sino que tienen mayor relación con el sector manufacturero. “En Kichink nos gustaría expandirnos a Estados Unidos y Latinoamérica, sobre todo en donde hay más áreas de oportunidad. El comercio electrónico está resuelto en las costas este y oeste, pero hay un área muy olvidada y rezagada: la comunidad latina”, afirmó.
Por otra parte, Aires del Campo tiene 80 empleados directos, y de manera indirecta beneficia a 3 mil 500 familias. “Es un proyecto que todavía tiene por donde crecer muchísimo, porque es un paraguas de muchas categorías: pollo, huevo, etcétera, y viene un crecimiento grande en el área de cereales y hortalizas”, dijo Latapí.
Ante las creencias populares, Latapí sostuvo que nunca es tarde para empoderar a una mujer y que la maternidad no está peleada con la falta de oportunidad en el emprendimiento. “Los tiempos actuales no son tan rígidos como para decir: ‘te casas, tienes hijos y ya’”, expresó.
De Heredia añadió que no es necesario casarse con un concepto o una formación académica, sino dejarse guiar por la intuición; asimismo, expuso que una parte esencial al momento de empoderar es tener en claro el camino al que se quiere llegar. m