LOS HERMANOS SERDÁN ESTÁN DE VUELTA EN CASA
Encabezan desfile del 5 de mayo en Puebla restos de Aquiles, Máximo y Carmen
Los restos mortuorios de los hermanos Aquiles, Carmen y Máximo Serdán Alatriste, revolucionarios y líderes del antirreeleccionismo maderista en Puebla, volvieron a casa en el 156 aniversario de la batalla del 5 de Mayo. Sus urnas recorrieron las calles de la ciudad al frente del tradicional desfile, como un acto solemne de reconocimiento y homenaje. “Este aniversario también lo conmemoramos con el rescate de los restos de los hermanos Serdán, que participaron enérgicamente por un país antirreeleccionista en esos momentos revolucionarios, lo que hoy nos da orgullo. Con la colaboración del INAH y del Ejército mexicano, tardamos más de un año y medio para recuperarlos, y hoy los héroes regresan a casa”, señaló Antonio Gali, gobernador del estado, en entrevista con MILENIO.
Tras recorrer 3.7 kilómetros, las urnas con los restos fueron trasladadas al Salón de Cabildos del Palacio Municipal, donde Gali, Rosario Robles —titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, quien acudió en representación del presidente Enrique Peña Nieto–, así como el alcalde, Luis Banck, montaron la primera guardia de honor, acompañados por descendientes de los Serdán.
A partir de mañana los restos descansarán en el que fuera el hogar de los Serdán: la casona de la calle de Santa Clara, en el centro de la ciudad, hoy Museo Regional de la Revolución Mexicana.
Integridad
Aquiles Serdán Álvarez, nieto del héroe poblano, destacó que la restauración de los restos mortuorios y el regreso a su casa representa “coronar una lucha que duró 20 años. Desde hace 20 años alertamos a las autoridades municipales de que había peligro de pérdida de las urnas. Como los restos de los héroes se vuelven propiedad de la nación, entonces los que menos contamos son los familiares”, dijo a MILENIO.
Recordó que en el gobierno de Gustavo Díaz Ordaz se ordenó exhumar los restos del panteón en el que se encontraban y construir un monumento a estos mártires para albergar su cripta en la avenida nombrada Hermanos Serdán en esta ciudad. Pero con el paso de los años se fue deteriorando, ya que “se consideraba como un panteón a cargo del municipio y no tenía vigilancia. Entonces emprendimos una cruzada”.
Expertos del INAH encontraron los huesos desintegrándose en la cripta, debido a las malas condiciones de humedad y hongos. “Me tocó presenciar el inventario de la osamenta de los tres hermanos. En el caso de Aquiles, y al llegar al cráneo, la antropóloga dijo que no lo podía sacar porque se estaba desbaratando, y que lo tenía que tratar adentro de la caja”, destacó Serdán Álvarez.
Tras el proceso de restauración, que tomó año y medio al INAH, los restos de cada uno fueron colocados en urnas de acrílico, y éstas dentro de otra de plata original que se encontraba en el monumento. “Están relucientes como cuando yo las vi hace 50 y tantos años, afortunadamente pude vivir para ver las dos etapas”, celebró.
El hijo del primogénito de Aquiles Serdán destacó que la Revolución mexicana se inició en la casona de la calle de Santa Clara. Cuando el levantamiento planteado en el Plan de San Luis fue descubierto por las autoridades, fue cateada la casa del líder del club político Luz y Progreso, Aquiles Serdán.
Como si hubiera estado ahí, narra que había 14 seguidores de Aquiles que se mantuvieron en la casa, “su hermana Natalia sacó a los niños y en la madrugada llegó el jefe de la policía, Miguel Cabrera, para aprehenderlo. Hubo intercambio de balazos y murió Cabrera. De allí se vino el mundo encima contra los 14, de los cuales quedaron vivos tres, más las mujeres: la mamá de Aquiles, su hermana Carmen y su esposa Filomena”.
A la madrugada siguiente, Aquiles “recibió un balazo en el cuello de parte del oficial Porfirio Pérez, lo tumbó y después otro oficial le dio el tiro de gracia”.
Tras rememorar esta historia, Serdán Álvarez señala que “la responsabilidad de llevar el nombre es tremenda, mi padre siempre así me lo dijo: ‘Recuerda que eres un Serdán. Debes tener integridad en la vida porque tienes que cuidar el nombre de tu abuelo”, subrayó.
Según el gobernador de Puebla, más de 85 mil personas asistieron al desfile, en el que participaron 2 mil militares y 4 mil 200 estudiantes. M