Sprayfield, la nueva ciudad de Los Simpson en Iztacalco
Todo empezó hace seis años, cuando Marco o Veloz y sus amigos pintaron algunos muros en la colonia Infonavit de la delegación Iztacalco, foco rojo de CdMx. El año pasado, en Facebook, Marco revivió la idea e hizo una convocatoria. “Fue una dinámica de quién quiere participar y se acercaron amigos, conocidos y otras personas que conocí apenas, la mayoría fanáticos de Los Simpson. Les dije que tenían que pintar una referencia o un capítulo, e hicieron estos murales”, dice Veloz.
Así fue como entre noviembre y marzo pasados un grupo de unos 20 grafiteros, dos de ellos mujeres y uno francés, pintaron murales en pasillos, calles y bajo puentes del conjunto habitacional, cuyas paredes están generalmente plagadas de firmas de grafiteros generalmente ilegales.
Entonces nació Sprayfield, una suerte de pequeño Springfield, la ciudad de la familia amarilla. “Plasmé lo que es mi nombre y lo hice en conjunto con mi compañero Blitz; somos del Club 27. Decidimos tomar los colores de la dona y de Homero, que es con lo que toda la gente identifica a Los Simpson. A la gente le llaman la atención los colores llamativos”, explica el grafitero Mayor.
Marco, quien con Cáncer, Comer y Mayor fundó un colectivo de artistas urbanos llamado Night Lores, considera que la polémica alrededor del grafiti legal o ilegal es un falso debate: “Es como si yo fuera católico o de cualquier otra religión, y yo dijera que mi Dios es el único, lo cual no es posible”.
Aunque a muchas personas les agrada la nueva vista, no todos reaccionan de la misma manera: “Se ve bien y a la vez mal porque es un edificio que se supone que es para respetar. Se vería mejor de otra manera, como poner algún tipo de presidente o algún héroe”, dice Kelly, una jovencita.
Con este homenaje a la serie animada se recuperan espacios, pero para Marco y su equipo se trata únicamente de realizar su pasatiempo favorito. “Si a la gente le parece bonito es un extra para nosotros”, dice. m