Atrás quedó la depresión
El sentirse derrotado y sin opciones orilló al ex campeón mexicano Carlos Cuadras a refugiarse en el alcohol y las drogas por un tiempo, hasta que todo en su vida empezó a cambiar.
“La depresión que sufrí después de la última derrota (ante McWilliams Arroyo) fue lo que me llevó a sentirme mal, esa noche me sentí perdedor, la vez contra el Chocolatito no me sentí perdedor, ni contra el Gallo me sentí perdedor. Es más, nunca había tenido en mi carrera dos derrotas seguidas y sentí que todo había acabado. Viví días muy tristes, eso me llevó a hacer cosas que no debía”, reveló el peleador que tuvo que ser ingresado a una clínica de rehabilitación para poder superar su adicción al alcohol y a la cocaína, la cual reveló consumió en varias ocasiones tras esa derrota.
A dos semanas de su ingreso a la clínica, El Principe asegura sentirse muy diferente, incluso con la motivación necesaria para retomar su carrera y buscar conquistar una segunda división.
“La rehabilitación y la terapia con la que continúo me ayudaron muchísimo. Ahora me siento muy bien. Gracias a Dios lo que he ganado en el boxeo me sirvió para ponerle a mi esposa su negocio de uñas, eso me pone muy contento, hacer algo por mi familia”, dijo el peleador que mantiene foja de 36-3-1, 27 KOs.