Donan cápsula antisismo a una pareja de Tlatelolco
El equipo cuenta con un GPS para su pronta localización y rescate, además está dotado de alimentos, agua y un tanque de oxígeno
El acuerdo considera la venta de 10 aparatos y a cambio uno será para gente en zona de riesgo
El ingeniero civil y creador de una cápsula de salvamento ante un sismo, Reynaldo Vela, donó uno de sus equipos a una pareja que vive en el nivel 17 del edificio Cuauhtémoc, que consta de 25 pisos, en Tlatelolco. La donación es parte de un convenio entre la Fundación de Responsabilidad Social 20/30 y Reynaldo Vela, el cual consiste en una mayor promoción por parte de la fundación a cambio de una de sus cápsulas. Durante la presentación en Parque México, el ingeniero anunció la donación a la pareja de 40 años, la cual se llevará a cabo el domingo 10 de junio. “Se realizaron dos exposiciones en el Monumento a la Revolución sobre las culturas locales y lo que se produce en la Ciudad de México, invitamos al ingeniero Vela y ahí se hizo el trato de intercambio de cada 10 cápsulas que se pongan a la venta, una se irá a donación”, informó Víctor González, vecino en Tlatelolco y vocero de la Fundación Responsabiliad Social 20/30.
La selección de las personas a la que será donada la cápsula se hizo a través de un estudio socioeconómico y de evidencias en video de cómo sobreviven a los temblores; en ellas se muestra cómo “tenían que amarrarse, porque rebotan en las paredes”.
La cápsula que será donada tiene un costo de 95 mil pesos, debido al peso que, en caso de que colapse el inmueble, tiene que soportar, porque el material fue reforzado, explicó Reynaldo Vela.
Por su parte, Víctor González reiteró que se pretende llevar el concurso a la zona de la Condesa, pero “ahí sería con una cápsula con características más sencillas, pero la de Tlatelolco es un reto porque tiene que aguantar la circunstancias de sobrevivencia ante un piso 17”.
Dijo que Tlatelolco llegó a ser una zona para clase media alta; sin embargo, ahora habitan personas de la tercera edad en su mayoría y es difícil mover a 45 mil personas que viven actualmente ahí.
La meta, dijo González, es vender en serie, porque el costo se reduciría mucho, ya que los materiales de construcción son importados.
En la exhibición se vendieron 10 cápsulas para la gente de la Condesa, la Roma y Polanco.
La cápsula de superviviencia en caso de sismo tiene el nombre K-107, en honor al número de salón de la Universidad Metropolitana Azcapotzalco donde fue construida por un grupo de jóvenes encabezado por Vela.
La cápsula cuenta con GPS para su pronta localización y rescate, está equipada con alimentos, así como agua y un tanque de oxígeno, con duración hasta de un mes. También puede flotar en caso de tsunami y soportar una caída de gran altura. m