Será un duelo decisivo para ambos
Serbia y Suiza, los equipos que más beneficiados salieron del debut del Grupo E, se dan cita en Kaliningrado en puertas de dar un paso de gigante en sus aspiraciones mundialistas. Serbia, que venció a Costa Rica, está a una victoria de hacer historia y de alcanzar, por primera vez como país independiente, los octavos de un Mundial. Suiza, por su parte, fue capaz de dejar en evidencia a Brasil, la gran favorita de Rusia 2018.
El conjunto balcánico, que cumple su segunda participación mundialista como Serbia después de la de Sudáfrica 2010 y la ausencia en Brasil, ha encontrado la estabilidad después del periodo de agitación interna que culminó con el cambio de seleccionador.
Mladen Krstajic ha sabido sosegar al grupo, al que ha inyectado de sangre nueva con varios de los jóvenes que fueron campeones del mundo con la Sub 20 en Nueva Zelanda hace tres años. Entre ellos Sergei Milinkovic Savic, la auténtica sensación de la primera fase, integrado, igual que el resto de incorporaciones, al núcleo duro que forman hombres como Vladimir Stojkovic, Aleksandar Kolarov, Antonio Rukavina y Nemanja Matic. Un triunfo de Serbia le llevaría matemáticamente a los octavos.
En una situación similar está Suiza, que sacó un empate contra Brasil. Los tres puntos de hoy no sellarían el pase, pero sí serían un paso al frente hacia el objetivo.
Con Stevan Zuber, Xherdan Shaqiri, Haris Safarovic y Granit Xhaka, Suiza buscará darle pelea a Serbia, tal como lo hizo con Brasil. Choque de alta intensidad, asegurado.