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EL TRICOLOR RECIBIÓ UNA SERENATA DE PARTE DE AFICIONADOS MEXICANOS EN ROSTOV, DONDE ESPERAN UN TRIUNFO SOBRE COREA PARA AMARRAR EL BOLETO
Les agradecemos mucho que nos vengan a visitar aquí, estamos muy emocionados” Queremos pedirles que nos dejen descansar ya que mañana (hoy) será un juego muy importante” Queremos darles mucha satisfacción; el grupo está aquí para agradecerles todo su apoyo” RAFAEL MÁRQUEZ Mediocampista de la selección
Son casi mil kilómetros de distancia entre Moscú y Rostov. Ruta que han cubierto cientos de seguidores mexicanos para presenciar el segundo duelo del representativo nacional, ahora frente a Corea del Sur.
Luego del inesperado triunfo sobre Alemania, varios aficionados no dudaron en sacar la chequera para invertir en el vuelo de sede a sede con duración de casi dos horas; otros optaron por una opción más económica, la del tren que los trasladó durante 12 horas. En fin, el sacrificio, ya sea monetario o de tiempo, habrá valido la pena cuando sean parte del público que presenciará el segundo compromiso del Tricolor.
SE ARMÓ LA SERENATA
Tras su arribo a Rostov, los aficionados mexicanos comenzaron a planear la serenata a la selección nacional. Un acto que se ha hecho costumbre en los duelos trascendentales del representativo azteca. Varios seguidores armaron un grupo en el que se informaban los pasos que se iban a dar. Las ganas ya existían desde el primer choque del Tricolor en Moscú, pero en la capital rusa fueron impedidos de realizarla. Así que el momento era el viernes para, entonces, entonar el “Cielito Lindo” y otras canciones afines.
Apenas llegaron los futbolistas a su hotel de concentración, luego de reconocer la cancha de la Arena Rostov, cuando escucharon a casi 100 seguidores que ya los esperaban y preparaban sus gargantas para entornar las canciones.
Los jugadores se plantaron enfrente del tumulto, bailaban, brincaban, se veían felices por el apoyo que su afición les brindaba en ese momento. Y así se lo hicieron saber a todos ellos.
El capitán Rafael Márquez tomó la palabra, y a nombre de todo el grupo emitió un breve mensaje: “Les agradecemos mucho que nos vengan a visitar aquí, estamos muy emocionados la verdad por el apoyo que estamos recibiendo y queremos darles las gracias personalmente todo el grupo”.
La gente gritaba, los alentaba, y luego, escucharon atentamente al ex jugador del Barcelona, quien prosiguió con su discurso. “Sí, les queremos pedir que nos dejen descansar ya que mañana va a ser un partido muy importante y queremos primeramente darles mucha satisfacción a todos ustedes. Así que se los pedimos de todo corazón. Agradecerles por todo el apoyo y todo el grupo aquí está para agradecerles”.
Era el momento de parar la celebración, de cesar con los cánticos, pues lo más importante era obedecer los deseos de los seleccionados.
En Moscú los aficionados no han podido llevar serenata al Tricolor ya que se encuentran en un auténtico búnker. Es difícil que si lo hacen los escuchen. Además, hay una seguridad extrema.
Así que, debía ser en ese instante en el que se notaban más accesibles. Al enterarse de lo ocurrido, otros seguidores llegaron al lugar en diferentes momentos, pero ya no pudieron disfrutar del ambiente previo. Al ver a algunos seguidores con la casaca verde, los elementos de seguridad del hotel comenzaron a poner vallas alrededor del inmueble. Incluso, llegaron dos patrullas para custodiar el descanso del conjunto azteca.
Duró poco el momento, pero fue valioso para el centenar de aficionados que acudieron a llevarle serenata a su selección. Hoy, el Tricolor tiene la posibilidad de firmar un arranque perfecto, de confirmar que el campanazo frente a Alemania no fue una casualidad, sino el trabajo de un proceso que ha valido la pena.