Banxico: difícil, alcanzar inflación de 3% en 2019
Una negociación larga del TLC llevará el tipo de cambio arriba de lo previsto; al organismo también le preocupan los aranceles
La Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) señaló que aunque la inflación ha mostrado una trayectoria descendente, algunos riesgos han comenzado a materializarse, por lo que ha aumentado la probabilidad de que presente un ritmo más lento de convergencia a su objetivo de 3 por ciento +/- un punto durante 2019.
Según la minuta de la última reunión de política monetaria del Banxico, donde decidió aumentar de 7.5 a 7.75 la tasa de interés de referencia, los integrantes de la junta explicaron que dos riesgos materializados son los precios de la gasolina y gas LP, que aumentaron como consecuencia de las referencias internacionales.
En este sentido, algunos miembros de la junta del banco central señalaron que persiste el riesgo de continuar enfrentando presiones al alza en los precios de algunos energéticos o choques en los de bienes agropecuarios.
Asimismo, mencionaron el riesgo de que se modifique la política de “suavizamiento” de los precios de las gasolinas; en especial, uno especificó que esto podría llevar a una mayor volatilidad y a una estacionalidad distinta de la inflación.
Otro de los integrantes de la junta detalló que la perspectiva de una negociación prolongada del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLC) puede implicar un nivel de tipo de cambio por encima de lo previsto para el resto del año, pero la mayoría mencionó el efecto que también podrían tener los aranceles impuestos a algunos productos e insumos importados de Estados Unidos.
Precios de gasolina y gas LP representan riesgos para este indicador económico
Resaltaron que si bien se prevé que el impacto de los aranceles sobre la inflación será acotado y de corta duración, podría ser mayor conforme se amplíe la lista de productos sujetos a dichas medidas.
La junta de gobierno dijo que mantendrá una postura monetaria prudente y continuará dando seguimiento al traspaso potencial de las variaciones del tipo de cambio a los precios, a la posición monetaria relativa entre México y EU y a la evolución de las condiciones de holgura en la economía. m
Hace unas semanas te comenté levemente de la reunión que tuvo Abel Hibert, asesor del entonces candidato y hoy virtual presidente electo, López Obrador, con la comisión de telecomunicaciones de la Barra de Abogados; pero como estábamos en tiempos electorales, no quise resbalar y caer en la casilla del periodista porrista o del chayoteado por el sistema y me quedé muy corto en el análisis de las propuestas del Peje en la materia.
Hoy, con toda libertad, puedo decirte que en la reunión varios de los representantes de la industria llegaron con mucho escepticismo y hasta con cierta agresividad con la propuesta del entonces candidato, pero poco a poco, Hibert pudo tranquilizar las ansias de muchos.
Se percibía cierta incredulidad sobre las propuestas, pues algunos pensaban que se pretendía regalar internet y otros querían que se pronunciara sobre los actores preponderantes y el respeto a la reforma de telecomunicaciones, así como de los organismos reguladores. Desde entonces Hibert les hizo ver que para el candidato la prioridad no eran los temas regulatorios, sino aumentar la cobertura de banda ancha en el país al promover la inversión y eliminar trabas fiscales o burocráticas para la instalación y compartición de infraestructura.
En ese sentido, para los próximos meses, el presidente y su equipo de telecomunicaciones se aplicarán en buscar ahorros, promover la inversión mixta (público-privada-social) y definir las zonas del país dónde se le pondrán más ganas. Sobre los organismos reguladores como la Cofece y el Ifetel, Hibert dijo desde entonces que se apoyará su autonomía e independencia. Ojalá. Por cierto, sobre la licitación de los servicios de administrados de seguridad de la información convocada por el Ifetel, corrijo. El miércoles pasado no fue el fallo, solamente se cerró el proceso de aclaraciones de los participantes muchos de los cuales siguen dudosos e inconformes pues me dicen que persisten las condiciones muy cerradas para que solamente las puedan cumplir ciertos participantes. No quiero pensar mal pero existe una amplia posibilidad de que se trate de un compromiso por cumplir con el gobierno saliente pues solo algún misterioso proveedor podría cumplir los extraños requisitos para ganar el contrato valuado entre 140 y 192 millones de pesos, pero cuya duración es por tiempo indefinido. Grupo Industrial Durandco, proveedora de servicios especializados del sector energético, ha dado el salto, pues la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), de Jaime Ruíz Sacristán, le informó a su presidente y fundador Juan Reynoso Durand, que por su compromiso, gobierno corporativo y finanzas sanas, fue considerada como candidata para su ingreso a la Bolsa en el mediano plazo, esto vía emisiones de deuda o en títulos de acciones. m