Forcejea Comic-Con con el acoso sexual
El evento, que reúne a miles de fanáticos año con año, busca promover la equidad
Comic-Con, que cada año congrega más de 130 mil admiradores, artistas, coleccionistas y eruditos de la cultura geek, ya ha sido afectada por la era de #MeToo y Time’s Up, con al menos una figura notable retirándose debido a señalamientos de conducta sexual inapropiada. Pero las interrogantes sobre su atmósfera y si los organizadores de la convención tomarán medidas adicionales para manejar acusaciones de acoso durante el evento que arranca el miércoles por la noche en San Diego prevalecen. “No creo que ninguna convención haya sido históricamente un lugar seguro o acogedor para las mujeres”, dice Cher Martinetti, directora editorial del sitio SYFY Wire’s Fangrrls.
El acoso sexual en las convenciones para fans es un problema a menudo abordado, pero el escrutinio será aún más intenso este año con la intensificada conciencia sobre la violencia sexual.
Apenas hace unas semanas, el fundador de Nerdist Chris Hardwick, un pilar de la Comic-Con que suele moderar numerosas conferencias, se retiró de los paneles de AMC y BBC America tras ser acusado por una ex novia de violencia sexual, señalamientos que él ha negado. Y desde el pasado otoño un puñado de rostros familiares en la Comic-Con también han sido acusados de conducta inapropiada, incluidos el fundador de Ain’t It Cool News Harry Knowles, y el creador de Honest Trailers, Andy Signore.
La Comic-Con tiene un código de conducta que sus representantes dicen que fue “creado intencionalmente para servir como una amplia medida que hace de la seguridad de los asistentes una prioridad”.