Una cara distinta
Ajustes hicieron que el desempeño de Diablos mejorara y, a diferencia de los duelos previos, ahora sí ganaron
Los batazos de los Diablos Rojos siguieron, pero a diferencia de lo que les sucedió en casa, ahora sí causaron daño, y con un buen pitcheo de sus abridores, pudieron sacar dos de los tres juegos en Mérida, un balance positivo no solo en los números sino en el aspecto mental, ya que el ver que las cosas tenían un perfil diferente, perdieron la presión que estaba empezando a convertirse en una carga.
Los Diablos viajaron a casa de los Leones con una marca de 2-10 en sus últimos 12 encuentros, en los que tuvieron oportunidades para hacer daño pero simplemente no encontraron los batazos para traducirlos en anotaciones, pero ante el reto de jugar en un parque amigable con los lanzadores, supieron hacer los ajustes necesarios para que no empeoraran las cosas y se demostraron que el mal momento quedó atrás.
Luego de tres encuentros en el parque Kukulcán, la artillería colorada terminó con 20 anotadas, claro, 11 de esas llegaron en el primer duelo, con 36 hits conectados, un promedio de 12 por choque. Esos números resultaron ser más dañinos para el pitcheo de los Leones, ya que se dieron cuando tuvieron gente en las almohadillas, lo que se tradujo en carreras. Los pingos se fueron de 11-41 con gente en posición de anotar, lo que se tradujo en un porcentaje de bateo de .268.
El mánager Víctor Bojórquez había confirmado que mantendría los ajustes en el line up para poder encontrar el balance que no habían demostrado, y después de ver que el martes ganaron 11-0 y habían lucido, en los dos duelos siguientes solo hizo dos movimientos. Cambió al segundo en el orden (Iván Terrazas estuvo en el primer choque y después, Emmanuel Ávila ocupó ese puesto), mientras que en el último juego metió a Íker Franco en lugar de Ricardo Valenzuela.
Con ello, el club encontró que su centro de gravedad estaría en los bats de David Vidal, Luis Jiménez, Henry Urrutia, Yeison Asencio y Alexei Ramírez, una combinación extranjera que está empezando a embonar y a dar resultados. Además de lo anterior, el club se vio beneficiado por el regreso de Urrutia, quien por una lesión estuvo fuera de los diamantes, pero ahora volvió para añadirle dinamita al line up. En esa serie la armada foránea anotó 11 de las 20 carreras, produciendo nueve de ellas, con 20 hits.
En cuanto al pitcheo, de nueva cuenta Patrick Johnson volvió a cumplir, llegando a tres victorias en el calendario, mientras que Carlos de León, normalmente relevo, cumplió al ser probado como abridor en el juego dos.