Censo de 32 delegados estatales y 264 regionales será casa por casa
Con el fin de un verdadero combate a la pobreza, el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, instruyó a los nuevos delegados estatales comenzar un censo, casa por casa, para identificar las necesidades de cada familia, inscribirlas en los programas sociales del próximo gobierno y garantizar que reciban el apoyo. Ayer, en el salón D’Luz en la colonia Roma se reunió con los 32 representantes estatales y 264 regionales que se encargarán de la aplicación de los programas sociales sin los obstáculos de la burocracia.
La meta del censo es saber “cuántos adultos mayores, cuántas personas con algún tipo de discapacidad, cuántos niños, cuántos jóvenes y cuántos estudiantes hay en cada familia para tener claro cuáles van a ser las políticas que se les van a dar”, explicó.
Quienes fueron anunciados como coordinadores estatales ahora se llamarán “delegados de programas integrales de desarrollo”, porque es esta figura la que permite la ley, y serán coordinados por el secretario de Organización de Morena, Gabriel García.
La próxima secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, quien encabezó la reunión, dijo que el Presidente electo pidió a los delegados “concentrarse en el territorio y en el contacto directo con la gente, de abajo hacia arriba y sin intermediarios”.
Precisó que deben explicar a cada familia los nuevos programas, como becas para jóvenes del nivel medio superior y pensión a adultos mayores y a personas con discapacidad.
Zoé Robledo, futuro subsecretario de Gobernación, destacó que el objetivo es que “el programa que antes era Solidaridad, que después se convirtió en Progresa, en Vive Mejor, y que hoy es Prospera, que no ha movido los indicadores de desarrollo, marginación y pobreza, tenga un nuevo momento”.
Aseguró que el proyecto “evolucionará hacia una mucho mejor y más eficiente respuesta y entrega directamente a la población; comentó que ya pidieron a la administración del presidente Enrique Peña Nieto el padrón de beneficiaros para poder cruzar datos y no duplicar.
Sánchez Cordero y Robledo insistieron en que no buscan afectar a los gobernadores de ningún estado ni de ningún partido, sino generar plena coordinación para garantizar que se logren abatir los índices de pobreza y marginación.
Resaltaron que buscan una “relación tersa, absolutamente institucional y sin invadir las atribuciones y facultades de estados y municipios”, además de que los gobiernos locales no dejarán de recibir los recursos federales que les corresponden. m