Oposición, por reanudar el diálogo en Nicaragua
La Alianza Cívica para la Justicia y la Democracia, en pro de las protestas sociales en Nicaragua, envió una carta pública al presidente Daniel Ortega instándolo a reanudar el diálogo, suspendido en julio, para resolver la grave crisis política que hoy cumple cuatro meses.
La carta, que circula en las redes sociales y tiene previsto la recolección de firmas de apoyo, urge al “cese de toda forma de violencia” y pide la reinstalación de la mesa de diálogo con mediación de la Conferencia Episcopal y garantes internacionales.
Los firmantes piden que en el diálogo se acuerde adelantar las elecciones generales de 2021 y se busquen coincidencias para “dar los pasos necesarios para detener el derramamiento de sangre e impedir que la república colapse”.
Entre los puntos a abordar en el diálogo, la Alianza Cívica se coordinará para propiciar “el cese de la confrontación y restablecer la seguridad ciudadana en todo el ámbito nacional”.
También demanda “la liberación de todos los prisioneros políticos e información detallada sobre la lista de personas que actualmente figuran como desaparecidas”.
Asimismo, “que el gobierno proceda a desarmar y disolver todos los grupos parapoliciales y otros civiles armados, bajo supervisión de la OEA y Naciones Unidas”, añade la carta a Ortega.
El diálogo se instaló el 16 de mayo pero quedó paralizado indefinidamente el 9 de julio, cuando Ortega rehusó adelantar los comicios. El gobierno acusó a la Alianza Cívica de pretender un “golpe de Estado” e involucró a los obispos mediadores como parte de un “plan terrorista” en su contra.
La crisis inició el 18 de abril con una protesta estudiantil y se agravó tras la violenta acción de policías y paramilitares que ha causado, según fuentes independientes, al menos 450 muertos. m