Aprender de la historia
David Fernández Dávalos, rector de la Ibero, señaló que es necesario, más que nunca, intentar revertir la historia, lanzarla en otra dirección. En esa tarea la universidad tiene un papel relevante.
El rector de la Ibero enfatizó la necesidad de recoger las experiencias históricas anteriores para desideologizar, historizarlas y aprender de ellas. De ahí, el sentido de volver a ver los acontecimientos del 2 de octubre de 1968.
“Me parece necesario, para esta conmemoración, a partir de un supuesto muy obvio, pero que nos acerca generacionalmente con el Movimiento Estudiantil del 68, que no es otra cosa que la crítica al actual modelo económico capitalista neoliberal. El modelo económico actual ha ampliado la brecha entre ricos y pobres, ha profundizado los procesos de explotación y de opresión con la precarización del empleo y la concentración del ingreso.
Ha depredado ecológicamente la totalidad del planeta, ha contribuido a la deshumanización creciente del hombre, de ahí que nazcan los movimientos sociales, justo aquellos que queremos incorporar en nuestra conmemoración”, señaló Fernández Dávalos.
José Sergio Barrales Domínguez, rector de la UACh, dijo que lo ocurrido en esa institución en aquella época “nos dejó la posibilidad de ser libres, de autogobernarnos y de difundir lo que creemos que debe hacerse en el país, a través del sentido social de nuestros estudiantes”.
En tanto, la presidenta del Colmex, Silvia Giorguli Saucedo, destacó que se requiere autonomía para mantener el carácter crítico, independiente y libre que debe caracterizar a las universidades. Esas instituciones también deben cumplir la misión de salvaguardar las visiones de largo plazo, más allá de coyunturas políticas.
Al término de la instalación del comité, el rector Fernández hizo entrega a la UNAM de la pieza de arte “La Patria Desgarrada”, resultado de una intervención textil y un performance desplegado en distintas fases, a lo largo de 10 meses.El 29 de septiembre se proyectará la versión restaurada de la película “El grito”, de Leobardo López Aretche, en la Plaza de las Tres Culturas; y el 30 de septiembre, en el mismo lugar, se proyectará la película “Olimpia”, dirigida por José Manuel Cravioto.