Acereros rechazan TLC si persisten los aranceles
La medida tiene un impacto negativo de 2 mil mdd para la economía nacional, detalla
Reconoce Trudeau la posibilidad de alcanzar un acuerdo mañana; la canciller Freeland, optimista
La industria siderúrgica nacional demandó al gobierno mexicano defender sus intereses y pedir la eliminación de los aranceles al acero impuestos por Estados Unidos, como parte de la negociación del Tratado de Libre Comercio (TLC).
A su vez, la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin) amagó con ir directamente a la Oficina de la Representación Comercial (USTR), en Washington, para pedir la derogación de los impuestos, mientras que la Secretaría de Economía señaló que el tema no ha sido parte de las mesas de negociación, pero espera que pueda resolverse antes de noviembre.
De acuerdo con información de la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y el Acero (Canacero), el arancel de 25 por ciento impuesto por Washington (medida 232) tiene un impacto negativo de 2 mil millones de dólares en la economía nacional, además de que ha provocado una caída de 37 por ciento de las exportaciones al vecino país del norte. “Es imperativo que el gobierno mexicano defienda a su industria nacional y solicite la exclusión de México de la medida 232 antes de cerrar la negociación”, expresó la Canacero mediante un comunicado. “Resulta difícil entender cómo México podría aceptar actualizar un TLC sin resolver la problemática, que deja en completa desventaja a un sector estratégico”, agregó.
El organismo acerero consideró que la medida arancelaria impuesta por Estados Unidos, que habla de proteger la seguridad nacional, es incongruente con los principios de libre comercio, por lo que no debe coexistir en un TLC. “Es un precedente que vulnera el acuerdo y pone en riesgo el libre mercado de la región. Si bien hoy los sectores de acero y aluminio son los afectados, debemos tener presente que en cualquier momento pueden afectarse otros bajo este supuesto nulificando los beneficios del pacto”, detalló.
Actualmente está en curso una investigación bajo la sección 232 en el ramo automotriz, misma que tiene fecha de conclusión en noviembre y que podría gravar también la entrada de vehículos a Estados Unidos.
Sobre el tema, el secretario de Economía, Ildefonso Guarjardo, señaló que esa no ha sido parte de las mesas de negociaciones en las últimas cinco semanas en que se ha reunido con el titular de la USTR, Robert Lighthizer. “Hemos platicado con el embajador Lighthizer, con quien eventualmente retomaremos el diálogo. Si llegamos a una firma del acuerdo antes de finalizar el año, hacia finales de noviembre, será un mensaje interesante pero, mientras eso no ocurra, las cuotas que está estableciendo México para balancear las acción de la sección 232 se mantienen, y las cuotas de Estados Unidos siguen sobre el acero mexicano”, explicó.
A su vez, Antonio Ortiz Mena, parte del equipo que negoció el TLC en 1994 y que ahora despacha desde Washington para la firma Albright Stonebridge Group, indicó que no hay un sustento para mantener los aranceles al acero y al aluminio. “Yo esperaría que ya que hay un acuerdo en principio en el TLC, Estados Unidos renunciará a esos aranceles porque no tienen un fundamento, no se han comprobado que amenaza su seguridad nacional”, dijo en entrevista.
El especialista en comercio agregó que mientras eso no suceda, no se puede hablar de que haya una normalización del comercio entre ambos países: “EU anunció que lo eliminará posteriormente, pero no sabemos cuándo será eso”.
En ese contexto, la Concamin afirmó que buscarán directamente a Robert Lighthizer y al secretario de Comercio, Wilbur Ross, para negociar el tema de
“No hay un sustento para mantener los impuestos”, asegura Antonio Ortiz Mena La Concamin buscará personalmente a los estadunidenses para negociar el tema
los aranceles al acero y aluminio.
En conferencia telefónica desde Washington, el presidente del organismo, Francisco Cervantes Díaz, aseguró que se buscarán medidas para contrarrestar las imposiciones de Estados Unidos y llegar a un buen acuerdo. “Una de las posibilidades es que se imponga una medida espejo, pero creo que hay otras herramientas y vamos a buscar cuáles podrían ser para negociar e ir directamente con Lighthizer y con Ross para que podamos buscar la manera, porque sí afecta a varios sectores”, afirmó.
Cervantes indicó que en Washington buscará también una reunión con el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, y con el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Juan Pablo Castañón, para abordar el tema. “El plan A es negociar, yo creo que eso podrá ser una medida, pero, al último, creo que hay muchas formas de que podamos resolver esto, y esperar a Canadá a que termine la negociación”, aseguró.
A su vez, el presidente del CCE, Juan Pablo Castañón, recordó que Canadá recién se incorporó a la negociación, y que algunos sectores siguen trabajando en los detalles, pero que es indispensable continuar las labores. “El proceso de negociación no ha finalizado, ya que recién se ha incorporado Canadá. Algunos sectores todavía están trabajando en los detalles con el equipo negociador, y por ello están expresando sus posiciones”, mencionó. M