Exponen el encanto de la pintura mazateca
Cuando Filogonio Velasco Naxín, artista oaxaqueño, entró a la primaria, se enfrentó a una situación que no había imaginado: la lengua española. Su niñez había transcurrido con la idea de que solo existía el mazateco, la lengua con la cual se había expresado hasta el momento, una experiencia que influyó no solo en su manera de afrontar su propia vida, sino incluso su relación con el arte. “Cuando hablaba el profesor me mantenía agachado, rayando mis cuadernos y haciendo algunos dibujos; llegué a la secundaria y ya desarrollaba mejor el dibujo, pero todo era como muy ‘a lo apache’, digo yo, porque la primera vez que pinté sobre un lienzo, tensé la tela y me puse a trabajar, pero toda la pintura se la chupaba… no sabía poner una base y todo eso.”
Ya con la experiencia y la formación académica, el creador logró construir un universo, en donde lo más importante es fundir su lengua con la cosmovisión de su pueblo, lo que se refleja en la exposición Jkuaaa kixí ku Xítu nijñaa/Realidades y ensueños, que se inaugura hoy en el Museo Nacional de las Culturas del Mundo (Moneda 13, Centro Histórico), en el marco de la quinta Fiesta de las Culturas Indígenas, Comunidades y Barrios Originarios de Ciudad de México. “Hay muy pocos espacios que han albergado mi identidad como mazateco, una identidad relacionada con mi lengua. Mi trabajo siempre integra una palabra o una frase en mazateco, lo que es una forma de llevar esta cultura al arte contemporáneo, además que me permite visibilizar a mi lengua”, dice Filogonio Velasco Naxín. m