Guanajuato, a la cabeza en policías asesinados
Menor de edad, uno de cada tres desaparecidos en Edomex
De acuerdo con cifras del Registro Nacional de Personas Desaparecidas, el Estado de México cuenta con 3 mil 890 casos que datan de 2006 y no han podido ser recuperados. Hasta el corte de abril de 2018, por lo menos en 36.34 por ciento mil 414 de estas incidencias son menores de edad.
Los motivos de extravío son inciertos a pesar de contar con una lista de causas acreditadas, ya que de acuerdo con la Secretaría de Justicia y Derechos Humanos, primero debe finalizar la etapa de investigación para determinar la razón de la ausencia, por lo que es complicado referir cuántos casos de estos son víctimas reales de delito.
Algunos de los casos que refiere el propio registro son tan antiguos que, a la fecha, los entonces infantes extraviados pueden ser mayores de edad y al no tener certeza de su paradero, se desconoce su estado de salud, si están en México o si continúan con vida.
La comisionada de búsqueda de personas en la entidad, Sol Salgado, dijo en entrevista que los padres de familia solicitaban emitir alertas de búsqueda de menores, ya que estos comúnmente son extraídos del núcleo por conflictos de pareja al atravesar una separación, lo que claramente disparaba las cifras de infantes en calidad de extraviados.
Ante este escenario y con el propósito de evitar engrosar una estadística, implementaron interrogatorios más severos para evitar elevar los números con información que comprometiera el estado real de la entidad.
“En algunas ocasiones hemos detectado que nos mienten y magnifican el incidente, les pedimos que nos digan la verdad, que de todos modos van a ser buscados y no emitir una alerta, ya que están con su papá o su mamá, y no corren riesgo alguno”, refirió. Pese a la medida, no disminuyeron significativamente las estadísticas.
Niñas, dos de cada tres
La mayoría de desapariciones corresponde a niñas, con 67.96 por ciento mientras que el resto son varones que no alcanzan la mayoría de edad.
Las denuncias por este hecho se han incrementado en los últimos cuatro años. En 2015 sumaban 102 en todo el estado, pero para 2016 la cifra alcanzó 249.
El histórico hasta la fecha lo tiene 2017 con 262 denuncias por desaparición, pero el panorama es desalentador, ya que el número puede ser rebasado. En el primer cuatrimestre de este año han sido documentados 117 casos.
Los diez municipios con mayor incidencia en la materia son Toluca, Ecatepec, Nezahualcóyotl, tomados como referentes para la elaboración de la encuesta de percepción de seguridad del Inegi, cuyo promedio señala 133 casos.
Las cifras descienden en lo que refiere a los siete puestos consecuentes, que son Chimalhuacán, Valle de Chalco, Chalco, Ixtapaluca, Tultitlán, Tecámac y Naucalpan, con una media de 48 desapariciones reportadas.
La capital mexiquense tiene el récord en desapariciones documentadas. A pesar de que las denuncias refieren en su mayoría a Toluca, las comunidades de San Cristóbal Huichochitlán, San Lorenzo Tepaltitlán y San Mateo Otzacatipan demuestran algunos casos de interés.
Salgado atribuyó que la concentración puede deberse a la centralización de las dependencias de seguridad.
Cifra oculta
El mismo registro arrojó datos de 62 personas, que, de acuerdo con las denuncias presentadas, en solo seis casos se sabe el municipio donde fueron vistos por última vez, mientras que el resto permanece en el desconocimiento. De los 23 niños varones en calidad de desconocido, cuatro solamente cuentan con señas particulares como lunares, tipo de ropa o estatura.
El panorama de las niñas no es distinto, ya que en seis casos no hay características, como perforaciones, cierto peinado, o tipo de uniforme, mientras que otras 39 son completamente desconocidas hasta por las autoridades.
En este tenor, la inseguridad en la entidad ha tenido repercusiones en la política internacional y es que el gobierno de EU emitió en julio pasado una lista para que sus compatriotas eviten visitar ciertos municipios del estado, todos en donde hay desapariciones y con un alto índice de criminalidad. Coincidentemente, estas localidades no son solo las mayormente pobladas, sino las que engrosan las filas de delitos del fuero común y federal.
Respecto de desapariciones forzadas está documentado un solo caso de una mujer extranjera. En Huehuetoca, Jennifer Paola Chacón
En los primeros cuatro meses de este año las autoridades han documentado 117 casos
ONG han establecido diversos protocolos para apoyar a las familias de las víctimas
Centeno, originaria de Honduras, quien fue vista por última vez el pasado 8 de enero. De ella no se tiene registro alguno.
En los últimos ocho años, cuatro menores más alimentan las cifras de los desaparecidos del fuero federal. Fueron vistos en Papalotla, Toluca, Naucalpan y Tultitlán.
Por instrucción federal, el Edomex es el primero de los 32 estados en contar con kits biométricos para la identificación de personas desaparecidas. Los aparatos instalados en seis municipios para este proyecto piloto detectan huellas dactilares, iris y el rostro para cruzar información con padrones nacionales e internacionales y dar con su lugar de origen. La esperanza de este proyecto, explicó Salgado, reposa en la proximidad, ya que los policías tendrán que ser capacitados para canalizar a los posibles desparecidos, iniciar las carpetas, retornarlos a su hogar y lograr reducir estas cifras.
Vital, el acompañamiento
Entre las principales acciones que realizan las agrupaciones civiles dedicadas al esclarecimiento de casos de robo o extravío de menores, adolescentes o personas en general, está la de brindar asesoría jurídica y acompañar a las familias, así como procurar fondos para respaldarlas durante el proceso.
Lo anterior fue expresado por David Mancera, presidente de la Fundación Solidaridad por las Familias, cuyo activismo permitió el desmantelamiento de una banda de tratantes de personas, violadores y asesinos, encabezados por un sujeto apodado El Mili, un soldado en activo que operaba en Ecatepec y Tecámac, además de que ha esclarecido decenas de casos de desaparecidos en el Edomex.
Refirió que la fundación que encabeza, y en la que están involucradas unas 67 organizaciones, se tienen establecidos protocolos para evitar incurrir en situaciones distintas al objetivo planteado, como el apoyar a las familias afectadas por el extravío de alguno de sus miembros.
“Generalmente nos llegan los casos por recomendación directa, aunque las personas nos contactan también por redes sociales”, dijo Mancera, quien comentó que se tiene mucho cuidado a la hora de conocer los asuntos, porque “de repente algunas empresas, como Elektra o Famsa, envían a gente para supuestamente denunciar la desaparición de una persona, cuando en realidad la buscan para cobrarle, quieren ahorrarse los gastos de investigación”.
“Para evitar esos casos lo primero que preguntamos es si hay denuncia; si no es así, apoyamos a la gente para que lo haga, acompañándola ante las autoridades, y si ya la presentaron, pedimos el número de la carpeta de investigación”. m