Cuernavaca le ayuda a superar el reto de dirigir
Alejandro Andrade, director de la película Cuernavaca, confesó que no sabía la dificultad que iba tener al realizar su ópera prima, pero conforme fue estudiando los personajes y la historia, experimentó que fue un reto grande, pero bien logrado. “Fue bastante complicado, fui muy inconsciente al hacer mi ópera prima, porque a veces no tenía idea de la dimensión de lo que estaba haciendo, y a la hora de llegar al set de repente pensé en por qué había escrito esta historia, pero al final ese era el gran reto”, destacó el realizador en entrevista con ¡hey!
La historia narra la vida de Andy (Emilio Puente), un niño que es llevado a vivir con su abuela en Cuernavaca, después de que su madre tuvo un accidente; al mismo tiempo Andy se sumerge a la incertidumbre de dónde se encuentra su padre.
Durante su estancia el joven tiene que aprender a cuidarse solo con la ausencia de sus padres, obligándose a crecer y ver la vida de una forma dura. “Me gustan mucho las películas de relaciones, me interesa mucho hablar, estudiar y entender cómo nos relacionamos y saber de dónde vienen ciertas neurosis, manías de la gente; entonces, me paso la vida preguntándome por qué esta persona es así, y cuando escribo trato de entender por qué cierta gente actúa de esta manera; quería una película donde el niño tuviera una transformación y un vuelco”, dijo Andrade. “Es necesario pasar por momentos duros y difíciles para poder crecer, madurar y cambiar de vida y justo es lo que trata la película, este niño que cambia y se transforma”, agregó.
El actor Moisés Arizmendi, interpreta a Andrés, un papá ausente, distante e irresponsable con el cuidado de su hijo, quien al mismo tiempo es ludópata. “Pensaba en los arquetipos, si nos vamos al cine de la época de oro llegaban Pedro y Jorge Negrete y le daban beso a una y dejaban hijos regados; ahora en la época actual pues está mal hecho y visto; las paternidades han cambiado por fortuna, pero desgraciadamente aún existen personajes como Andrés que están muy deprimidos y no se hacen cargo de sus hijos”, dijo.