EL INAH CUENTA CON UN PROGRAMA DE PREVENCIÓN Solo 5 museos, con plan contra riesgos
“Si bien es cierto que todos estamos expuestos a tener algún siniestro, es muy importante estar cubiertos para resarcir el daño”: aseguradora Aon
De los poco más de mil 300 museos existentes en todo el país, según un recuento del Sistema de Información Cultural (SIC), de la Secretaría de Cultura del gobierno federal, solo los recintos Diego Rivera, Frida Kahlo, Franz Mayer, Interactivo de Economía y Centro Cultural Isidro Fabela —que funcionan bajo fideicomisos administrados por el Banco de México—, cuentan con un “programa de administración de riesgos” para prevenir catástrofes, como el incendio en Río de Janeiro que acabó con el 90 por ciento del acervo del Museo Nacional de Brasil.
Fermín Ramos Becerril, director comercial de Aon México, la firma que es líder mundial en servicios profesionales de soluciones de riesgo, en 120 países, se sorprendió de que el recinto brasileño careciera de planes de prevención y de seguros, no solo para velar por el patrimonio, sino por el bienestar de las personas, con pólizas de responsabilidad civil.
Los museos y las instituciones culturales a cargo de preservar y vigilar el patrimonio en México, recomendó Ramos Becerril, deberían contar con estudios conocidos como el “Construction Operation Protection and Exposition” (COPE), que arroja una radiografía muy puntual de los posibles riesgos que pueden presentar, cómo identificarlos y reducirlos. “Si bien es cierto que todos estamos expuestos a tener algún siniestro, es muy importante estar cubiertos para resarcir el daño, pero es más importante evitarlo. La mejor inversión que se pueda hacer es la prevención de riesgos”, afirmó el experto.
Por eso los museos Diego Rivera, Frida Kahlo, Franz Mayer e Isidro Fabela cuentan con un programa de control de incidentes. Esas instituciones, por el valor que representan sus acervos, decidieron contratar y pagar por este servicio que previene cualquier tipo de imprevisto, comentó el director comercial de Aon México. El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), por su parte, cuenta con el PreINAH, programa institucional de prevención de desastres, impulsado en coordinación con protección civil desde 2002, el cual tiene como finalidad atender riesgos y emergencias. Se cuenta con un Atlas de riesgos regionales y locales del Conapred, con la pretensión de identificar y definir las estrategias ante desastres.
Sin embargo, en el 2017 la experiencia catastrófica y los estragos en los museos y momentos históricos y arqueológicos, ocasionados por los terremotos del 7 de septiembre de magnitud 8.2 —el sismo más intenso en los últimos 100 años—, y del 19 de septiembre, de 7.1 grados, con epicentro en el altiplano mexicano, rebasaron todos los protocolos, reconoció el director del INAH, Diego Prieto, en el pasado Encuentro Internacional de Protección del Patrimonio Cultural en Emergencia. “El patrimonio se vio afectado en 11 estados del país, dañando a alrededor de dos mil 300 inmuebles históricos y arqueológicos y una cantidad mayor de seis mil, según la forma en que se establezca el conteo de bienes muebles asociados a dichos inmuebles”, indicó el funcionario.
Con lo que esta experiencia, agregó: “Ha significado para el INAH la necesidad de repensar su sistema de emergencia y no solo para el instituto, sino para el Estado mexicano”. El área de administración de riesgos y de prevención lo que busca es minimizar la posibilidad de siniestros, explicó Fermín Ramos Becerril, director comercial de Aon México. “El mejor peso es el que se invierte en la prevención y no en recuperación, aunque contamos con expertos en siniestros para tratar de recuperar lo más posible. El riesgo de incendio en los museos y en casi toda la industria está presente”, señaló.
En entrevista, aseveró que las compañías de seguros en el mundo no incrementarán sus costos a consecuencia del incendio ocurrido en el Museo Nacional de Brasil, ya que la probabilidad de que suceda un siniestro similar en otra parte del mundo es reducida.
No obstante, reconoció que a raíz de los sismos del año pasado en México, sí subieron los montos de seguros para los inmuebles. El mercado se endureció y las primas se incrementaron. M