Inicia juicio por escándalo en la Academia Sueca
Jean-Claude Arnault, protagonista del caso, es acusado de dos violaciones a una mujer
Un tribunal de Estocolmo abrió ayer el juicio por violación contra el artista francés Jean-Claude Arnault, protagonista de un escándalo sexual y de filtraciones reveladas en plena tempestad #MeToo, y detonante de la crisis histórica que atraviesa la Academia Sueca, la institución que otorga el Nobel de Literatura.
Jean-Claude Arnault, de 72 años, casado con una integrante de la Academia Sueca que otorga desde 1901 el premio Nobel de Literatura, no hizo ninguna declaración al llegar a la sala pero “rechaza las acusaciones”, anunció ante los jueces su abogado, Björn Hurtig. Arnault está acusado de dos violaciones contra la misma demandante. Puede ser condenado de dos a seis años de prisión.
Como ocurre a menudo con los casos de agresiones sexuales, el tribunal ordenó que la audiencia se celebre a puerta cerrada. La víctima de las dos violaciones, cuya identidad no fue revelada, está representada por Elisabeth Massi Fritz, una conocida abogada sueca especializada en defender a mujeres.
Arnault fue una personalidad influyente del mundo cultural en Estocolmo. Su Foro, un club muy selecto, era visitado por toda la intelligentsia de Estocolmo. Varias jóvenes, amantes de literatura, intentaban en él acercarse a un editor o a un escritor conocido.
Un mes después de las revelaciones de las violaciones y abusos sexuales presuntamente cometidos por el productor Harvey Weinstein, el diario Dagens Nyheter (DN) publicó el testimonio anónimo de 18 mujeres que afirmaron haber sido agredidas o acosadas por Jean-Claude Arnault. El escándalo provocó un cataclismo en la Academia, con la que Arnault mantenía estrechos vínculos artísticos y
Al menos 18 personas aseguran haber sido acosadas o agredidas sexualmente por éste
financieros. Una investigación estableció que varias mujeres, académicas o esposas e hijas de académicos, también sufrieron la “intimidad no deseada” y los comportamientos “inapropiados” del acusado. “De pronto, sentí sus manos en mis nalgas. En ningún momento le había mostrado interés. Estaba conmocionada”, relató la escritora Elise Karlsson, una de las mujeres que dio su testimonio. “Le dije: ‘no me toques’, y lo abofeteé, antes de irme. Vino hacia mí y me dijo que jamás volvería a encontrar un trabajo”.
El 5 de octubre de 2011, en un apartamento de Estocolmo, Arnault obligó a su acusadora a una “relación oral” y luego a una penetración vaginal, cuando la joven se hallaba en “estado de vulnerabilidad” y de “intenso miedo”, lo que le impidió defenderse, según el acta de acusación. Los hechos se habrían repetido la noche del 2 al 3 de diciembre de 2011 en el mismo apartamento, cuando la víctima dormía.
El caso ha revelado un funcionamiento opaco de la Academia, así como sus conflictos de interés, sus juegos de influencias y la cultura del silencio que en ella reinaba. Ocho académicos han renunciado de forma definitiva o temporal. La atribución del Nobel de Literatura 2018 ha sido postergada a 2019, mientras el prestigioso cónclave intenta una difícil reconstrucción. La Academia debe elegir en un próximo futuro a sus nuevos miembros, que designarán a los premiados Nobel 2018 y 2019.