“EU pone a China un cuchillo en el cuello”
Lighthizer prevé que un cambio en la política económica del país asiático “no será fácil”
El viceministro de Comercio chino, Wang Shouwen, dijo que es difícil seguir negociando con Estados Unidos cuando Washington le pone “un cuchillo en el cuello” a su país; por su parte, Robert Lighthizer expresó que “no será fácil” un cambio en la política económica de China.
El máximo diplomático del gobierno chino dijo ante un grupo de empresarios en una reunión en Nueva York que las conversaciones no pueden tener lugar en un contexto de “amenazas y presiones”.
“Si esto continúa, destruirá en un instante los logros de las últimas cuatro décadas de relaciones entre China y Estados Unidos”, dijo Wang frente a miembros del Comité Nacional de Relaciones entre Estados Unidos y China.
Por separado, el representante de Comercio de Estados Unidos, Robert Lighthizer, afirmó que los “diálogos interminables” con el gobierno chino en las últimas décadas habían “fracasado miserablemente” en su intento por cambiar las políticas de Pekín, de modo que Donald Trump decidió aplicar presión directa a través de aranceles.
Las medidas comerciales tomadas por la Casa Blanca, dijo Lighthizer, se basan en estudios sobre las prácticas en transferencia de tecnología y propiedad intelectual de China.
Después de que China tomó medidas en represalia contra lo que Lighthizer calificó de“modestos” aranceles a bienes estadunidenses por 50 mil millones de dólares, el gobierno de Trump activó el lunes los gravámenes de 10 por ciento a productos chinos valuados en 200 mil millones de dólares. “Empezamos a atender este tema con bastante sobriedad luego de mucho estudio, pero el hecho es que lo que habíamos hecho (antes) fracasó de una manera evidente”, declaró Lighthizer. “No va a ser fácil. Los cambios no son nunca fáciles”, añadió el funcionario.
Ni Washington ni Pekín parecen estar dispuestos a hacer concesiones en una disputa cada vez más amarga, lo que aumenta el riesgo de una larga batalla que puede enfriar la inversión e interrumpir el comercio mundial.
El lunes pasado entraron en vigor aranceles estadunidenses sobre bienes chinos y otros aplicados por Pekín como represalia a productos valuados en 60 mil millones de dólares, incluido el gas natural licuado, decisiones que intensificaron la disputa comercial entre las dos mayores economías del mundo.
China también acusó a Estados Unidos de participar en bullying comercial, y dijo que Washington intimidaba a otros países para que se sometan a su voluntad, según un libro blanco sobre el enfrentamiento publicado el lunes por el Consejo de Estado de China. m