¿Viva Zapata?

Con sus 91 años, a Juan Crisóstomo se le rompe la voz. “Se emocionó”, murmura una de sus hijas. Acabo de darle un abrazo después de firmar la venta de dos metros lineales de su terreno, y entonces este buen vecino me dice: “Cuando tenga tiempo viene para que le cuente una historia”. Claro que sí, Don Cristo… así le decimos en el pueblo.

Pero antes de concluir mi frase de sincera aceptación, me dice: “una historia de mi papá”. Y sin más, comienza su relato, uno de los tantos que me ha platicado. De cada uno, podría hacerse una película de esas que, sin serlo, parecen de ficción.

“Mi papá tuvo que irse del pueblo porque la última vez que Zapata lo quemó, dijo que no quería encontrar a nadie allí, porque o lo fusilaba o lo colgaba”. Con ojos de plato interrumpo: ¿Zapata? ¿O se refiere a Villa, Don Cristo? Me apresuro a encender mi grabadora a la par que pregunto a su hija: ¿puedo grabarlo? Su respuesta es afirmativa.

Pregunto: ¿Zapata quemó su pueblo? “¡Tres veces!”, responde sonriendo. Pero la última vez dijo que si regresaba y encontraba a alguien, lo fusilaba.

“Mi abuelo agarró a la familia y se fueron todos a Huitzuco. Pero lo agarraron los zapatistas y le preguntaron: ¿Eres Carranclán? Carranclán, de Carranza”, dice Don Cristo mientras sonríe. “Y no, no era carranclán; nomás vivía ahí. Pero le echaron una soga al cuello y así lo llevaron amarrado de los codos: ni le daban de comer. De pueblo en pueblo lo trajeron a pie…”

Don Cristo está contento, contándome la larga historia de cómo su abuelo se salvó de los zapatistas: un primo suyo, también zapatista, lo reconoció.

El libro sobre Francisco Villa recientemente escrito por Raúl Herrera hizo pedazos varios mitos ya desquebrajados alrededor de Villa. El relato de Don Cristo, me hace ver que seguramente puede hacerse lo mismo con Zapata: existe una enorme distancia entre las imágenes de nuestros héroes y los hombres que en realidad fueron.

Zapata es un ícono intocable. Pero no lo es para mi vecino morelense ni para muchos del mismo pueblo. ¿Quiénes somos los mexicanos? ¿Cuál ha sido nuestro proceso histórico?

Un héroe para mí indiscutible, cae al suelo… otra vez. Una disculpa, pero en verdad: ¿viva Zapata? m