Broadway II

@HugoHernandez

Dear Evan Hansen

es un musical que podría atrapar al público mexicano

Fascinado, continúoconmirecuento por los teatros de Broadwayquepude visitar hace un par de semanas.

En la pasada entrega hablé de las obras King Kong y Hamilton. Toca el turno a otras tres maravillas.

Arranco con Harry Potter y el legado maldito. Como puede suponerse, se trata de un fenómeno de taquilla. Mil 800 personas entran a cada función y nunca hay un lugar vacío.

La trama sucede 19 años después del momento en que finaliza la saga literaria-cinematográfica. Harry y sus amigos son ya adultos, están casados, tienen hijos, y…

Tan intrincada y sorprendente es la historia que hay que verla en dos funciones diferentes. Y de verdad nadie saldrá decepcionado.

Hadestown, basada en el mito de Orfeo y Eurídice, es realmente sensacional.

Ganadora este año de ocho de los 14 premios Tony a los que fue nominada, es una muestra de los miles de caminos que puede tomar el lenguaje teatral. Conmovedora, divertida, sorprendente, esta puesta en escena ubica la historia en la gran depresión del 29, pero el montaje (escenografía, vestuario, iluminación, etcétera) hablan de un mundo casi apocalíptico. Finalmente, bravo para

Dear Evan Hansen, un montaje pequeño (siete actores, siete músicos, una sencilla escenografía) que conquista el corazón de todo mundo con una historia muy actual sobre el

bullying y otros muchos problemas que enfrentan los jóvenes de hoy.

Sin duda, Dear Evan Hansen es un musical que muy bien podría atrapar al público mexicano.

Así fue mi fin de semana largo en Broadway, lugar al que siempre quiere uno volver.