Del diseño gráfico a la animación
Yunuen Esparza estudió diseño gráfico y trabajó en una empresa de publicidad virtual, donde conoció toda la parte digital y aprendió el manejo de la animación en 3D. Con el tiempo se dedica a pintar, “que es lo que siempre me ha gustado y empiezo a investigar, y poco a poco me fui profesionalizando”. Neon Caron, quien se inició en el arte en 2008 luego de superar su condición de daltónico, dice que empezó pintando en sus tiempos libres de la oficina, y al paso de un año realizó su primera exhibición. do una lupa o una lente. Yo creo que siempre se podrá jugar con la tecnología para integrarla al arte, para darle nuevas capas de información, a pesar de que la pintura tradicional siempre va a existir, porque si se te acaba la batería o se va la luz, ya te quedaste sin herramientas, así que lo que permanecerá es lo físico y en algunas situaciones estará auxiliada con la tecnología”, explica Yunuen Esparza.
Para Neon Caron, “lo que sucede con el arte aumentado es que viene a romper el esquema de nuestros contemporáneos y la forma tradicional de apreciarlo. En el arte hay una vertiente tecnológica que florecerá más, va a encontrar másespaciosparaexponeryhabrá más gente explorando ese medio como forma de expresión, pero el arte tradicional seguirá”.
Retomar la sencillez
La realidad aumentada es aplicada en videojuegos, libros y en redes sociales, pero para Yunuen y Neon es un nicho en el que se puede aplicar y experimentar. Personajes del mundo del arte, caricaturas, músicos y objetos de uso común se pueden observar en sus creaciones.
La artista mexicana, quien tentativamente en agosto tendrá una exposición en el Centro Cultural Jaime Torres Bodet, la cual estaba programada para inaugurarse en marzo pero se pospuso por el covid-19, apunta que su motivación para pintar es dar un suspiro.
“Quiero retomar la sencillez y lo básico, precisamente porque todo se ha perdido en el entorno caótico y estresante de esta vida.
Es algo sencillo, directo, agradable, irónico, sarcástico. Me gusta hacer que las personas se lleven una experiencia agradable con mi obra”, dice la creadora.
Pero llegar al resultado final fue una búsqueda y espera, porque fue hasta 2013-2014 que la tecnología llegó a los teléfonos inteligentes.
“Tuve que esperar unos años y comencé a desarrollar mi idea, pero fue a final de 2015 que Apple liberó mi desarrollo. En el arte aumentado se necesita un dispositivo para terminar de apreciar la obra, porque tienes la parte pictórica frente de ti, pero si sacas el teléfono, abres la aplicación y lo escaneas, vives otra experiencia, otro universo paralelo: entras como en otra relación con el objeto”, agrega Neon Caron.