Repunte de contagios presiona el Buen Fin
La participación de las tiendas físicas en algunos estados se encuentra en duda por las medidas contra el covid El sistema tributario ha evolucionado, pero éste puede influir en inhibir la formalidad: Noriega
Este año, “como ningún otro, es fundamental realizar el Buen Fin para reactivar el consumo en el país y con ello la economía”; sin embargo el relajamiento de la poblaciónenlaaplicacióndemedidas sanitarias está abriendo la posibilidad de que en algunos estados los establecimientos comerciales no puedan abrir sus puertas.
Lo anterior lo advirtió el jefe de la Unidad de Competitividad y Competencia de la Secretaría de Economía (SE), Jorge Eduardo Arreola, quien reconoció que el repunte de casos de covid-19 de las últimas semanas está presionando la organización de la campaña de ofertas y promociones, que este año se realizará del 9 al 20 de noviembre.
Explicó que el consumo, que es uno de los principales motores de la economía, ha sido duramente castigado por la pandemia, y el Buen Fin servirá para “inyectar un mayor dinamismo a la economía vía consumo interno y todo lo que existe detrás”.
“Esperemos que no siga esto (el relajamientodelaciudadaníafrente al covid-19) que hemos visto durante el pasado fin de semana, porquepodríadejarfueraalosgrandes comercios, que no son cadenas de supermercados, de lo que sería la venta física”, advirtió.
Destacó que habían sido optimistas de que la disminución de contagiosevolucionaríabientodavía hasta noviembre, “pero las cosas nos están indicando que debemossermáscuidadososeneltema de salud, y buscaremos formas de colaboración con los estados, para que El Buen Fin ayude a recuperar la economía y además cumpla con la nueva normalidad”, sostuvo el funcionario federal.
Lo anterior lo reiteró el presidente de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (ConcanacoServytur), quien confió en que se llegará a la meta de ventas de 118 mil millones de pesos.
Carlos Noriega, titular de la Unidad de Seguros, Pensiones y Ahorro de la Secretaría de Hacienda, aseguró que debido a la forma en la que está distribuida la actividad tributaria, aproximadamente 70 por ciento de la población queda exenta del pago de impuesto sobre la renta (ISR), lo que implica una menor entrada de recursos para la Federación.
Explicó que esto se debe a que dicho segmento de la ciudadanía tiene bajos ingresos, “entonces tenemos un sector que yo diría informal y legalmente exento del pago de impuestos”.
Durante la presentación del Reporte de Economía y Desarrollo 2020, elaborado por el Banco Interamericano de Desarrollo (CAF), Noriega Curtis señaló que el sistema tributario ha evolucionado a lo largo de los años, pero éste puede influir en inhibir la formalidad y, por ende, reducir los niveles de pensiones en el país.
Agregó que otro tema relevante que influye en la baja penetración de los sistemas de pensiones es el de la legislación del mercado laboral, toda vez que el aumento en la contribución a la seguridad social puede incentivar a la informalidad; sin embargo, en la parte regulatoria esta situación también constituye un inhibidor de la formalidad.
“Cuando el patrón tiene que pagar seguridad social, capacitaciones, derechos de huelga, eso también encarece las oportunidades laborales. Entonces estamos hablando de que en el mundo pospandemia estos