Revlon llega a trato de último minuto y evita la bancarrota
En un convenio con acreedores, los multimillonarios Ron Perelman y Carl Icahn consiguieron el canje de 236 mdd en bonos, ligeramente por debajo de 69% de la deuda pendiente
Revlon logró salir del borde de la bancarrota después de que los multimillonarios Ron Perelman y Carl Icahn pusieron fin a un enfrentamiento sobre la deuda de la compañía de cosméticos.
Icahn se había resistido durante un intento de un mes de Revlon de canjear 343 millones de dólares en bonos con vencimiento en 2021 con un gran descuento, ya que la firma buscaba controlar su carga de deuda antes de la fecha límite de la próxima semana sobre la que advirtió que podía llevarla a la bancarrota.
La posible insolvencia habría eliminado la propiedad de 87 por ciento que Perelman tiene en las acciones en circulación de Revlon, sobre las que ganó el control en 1985 después de una batalla de adquisición hostil alimentada por los bonos basura de Michael Milken. La empresa ahora está bajo la direccióndesuhijaDebraPerelman.
También habría dejado a Icahn con pérdidas como uno de los mayores tenedores de bonos, según personas cercanas a la situación.
Pero a última hora, los dos multimillonarios que se enfrentaron a finales de la década de 1990 por Marvel Entertainment, rompieron el punto muerto.
Revlon aseguró compromisos de suficientes tenedores de bonos para evitar la bancarrota, con la presentación de aproximadamente236millonesdedólares,oligeramente por debajo de 69 por ciento deladeudapendiente.Personasfamiliarizadasconelacuerdodijeron que no habría tenido éxito si Icahn no hubiera ofrecido al menos algunos de sus bonos.
“Como resultado, la empresa no espera que sea necesario ningún procedimiento de quiebra o insolvencia”, indicó la compañía en un comunicado.
Los tenedores de bonos que participan en el canje acordaron recibir 32.5 centavos por cada dólar o una combinación de efectivo y un nuevo préstamo. A los que no participen se les va a pagar en su totalidad, señaló la compañía.
La batalla había creado un dilema para otros tenedores de bonos: