¿Qué hará Gertz con Cienfuegos?
Una rápida y eficiente operación de la cancillería frente al gobierno estadunidense ha dado como resultado que el gobierno de Estados Unidos descarte sus acusaciones en contra del general Salvador Cienfuegos.
Hay una lógica diplomática y de relación bilateral que se ha impuesto: no puedes, ni aunque seas EU, investigar, indiciar y arrestar a un ex secretario de la Defensa de otro país, en este caso tu mayor socio comercial, con el que compartes tu mayor frontera, de donde viene la mayor parte de las drogas que consume tu población, etcétera, etcétera, etcétera, sin avisarle, haciendo todo por sorpresa, sin dar oportunidad para que sea investigado en México.
En el gobierno de EU no todos estaban contentos con lo que la DEA y la fiscalía neoyorquina habían hecho. No es, por supuesto, la primera vez que hacen algo así… recordemos el caso Camarena; pero este es un ex secretario de la Defensa, secretaría con la que, además, las agencias estadunidenses trabajan todos los días y más ahora que el Ejército crece y crece y lo controla todo.
El primer párrafo de la petición del fiscal al juez lo deja bastante claro: “Estados Unidos ha determinado que consideraciones sensibles e importantes de política exterior son de más peso que procesar al acusado después de analizar la totalidad de las circunstancias, y por eso pide que el caso se descarte”.
No todos en EU estaban alegres con lo hecho por la DEA y la fiscalía de NY
El trabajo del canciller está hecho. Toca ahora a Alejandro Gertz decidir qué hacer con el expediente que recibió el 8 de noviembre, según informó Ebrard, de parte de la fiscalía neoyorquina.
Los seguidores del gobierno se habían emocionado el último mes señal ando los supuestos horrores de Cienfuegos, su segura culpabilidad, el horror que era el neoliberalismo hasta en el Ejército durante aquellos horribles tiempos.
Ellos querrán que Gertz meta a la cárcel para siempre al general… o al menos, según la nueva costumbre en la FGR, le ofrezca un criterio de oportunidad para que culpe a Peña y Videgaray.
Gertz podría también determinar que la evidencia que recibió hace unos días no configura delito en México o armarle un caso por dos tonterías que no importen.
O podría pasar el expediente, mediante algún argumento legaloide, a la justicia militar para que ellos se hagan bolas.