“La equidad laboral no es por concesión”
Asegura la directora de Renault México que en la empresa los salarios son por capacidad sin distingo
Para Magda López, directora general de Renault, la inclusión de las mujeres no responde a una concesión, no se trata de crear condiciones especiales para ellas o de cumplir con una cuota de género, porque se pierde valor y no sería legítimo, se trata de crear condiciones para una competencia equitativa entre mujeres y hombres.
La equidad de género, dice, hace sentido no solo por un tema de justicia social, hace sentido porque está demostrado que las economías que mejoran la participación activa de la mujer, pueden incrementar su producto interno bruto hasta en 26 por ciento, generar economía, mejores condiciones de vida para las sociedades y las familias, expuso en entrevista con MILENIO.
“Se deben generar condiciones para que lo que prime sea el reconocimiento al talento, al mérito, a la contribución en la generación de valor, independientemente de quién lo entregue, y en estas condiciones asegurar que tenemos políticas claras e igualitarias, por ejemplo, en el tema salarial”.
De acuerdo con la directiva, en el corporativo de Renault de México se paga por responsabilidad, por el nivel que tiene la persona, no por el género, y para garantizarlo hay un comité en donde se evalúa al talento. Después con recursos humanos se hace esa valoración para asegurar que ese talento es reconocido por su mérito, “Nosotros no tenemos casos donde la mujer gane menos”.
“No tiene que ver ni la edad ni el género ni la experiencia, sino si es una persona que está contribuyendo de una manera superior, es lo que vale. Eso genera una competencia sana donde todos pueden entrar porque no hay condiciones limitantes, digamos intrínsecas como el género, la edad o la experiencia, sino un tema ciento por ciento de mérito de contribución de generación de valor”.
Como una de las cuatro mujeres que encabeza en México una firma automotriz, Magda López refirió, “yo no quiero condiciones especiales para mí, porqué si no también sería un tipo de discriminación inversa o perdería valor lo que te entreguen. Por ser mujer no buscamos que se abran los mares y me dejen pasar o que se quiten los hombres. Lo que espero es que mi contribución sea valorada”.
Uno de sus logros al frente de Renault México, es que logró reducir la brecha de género en las operaciones de la empresa, de contar con 70 por ciento de hombres y 30 por ciento de mujeres previo a su llegada, ahora son 54 por ciento hombres y 46 por ciento mujeres.
“No se trata de hacer ejercicios de inclusión per se, es hacer el proceso más inteligente desde el principio. Desde el proceso de reclutamiento incorporar a mujeres, permite que entren al proceso y naturalmente se van a ir incorporando”, expuso.
Como una recomendación a las mujeres López dijo: “no permitas que por ser mujer te genere una desventaja en una conversación, en una negociación. Ser mujer no impide poner los temas correctos en la mesa, porque no es un tema de concesión o de género, es un tema de negocios”, señala la directora que se sienta a la mesa a negociar con su red de distribuidores, encabezada en su totalidad por hombres.
“Es una postura de igual a igual porque no te puedes poner abajo por tu condición de mujer, pero tampoco arriba. Es una postura igualitaria de negociar, de sentarnos y entender dónde están los pros y contras de cada situación.
Para tener un ambiente en la sociedad más equitativo, Magda insistió en sentarse a conversar con los hombres. “porque si el diálogo se mantiene solo entre nosotras no vamos a avanzar, ¿A quién le estás hablando… a otra mujer? No es ahí donde está el reto. Hay que salir de esta agresión al género masculino, más bien tenemos que sumarlo”, sostuvo.
No quiero condiciones especiales, eso sería una discriminación inversa, dice