Doblaje y pánico absurdo
Aún estamos por regresar a los cines por completo y ya cundió otro pánico. Ayer por todos lados la gente se quejaba sobre lo que entendían como “el fin del doblaje en México”, cuando nada podría estar más alejado de la realidad. Por eso buscamos directamente a Sergio Mayer, quien encabeza la Comisión de Cultura y Cinematografía de la Cámara de Diputados, para que nos explicara qué estaba pasando.
“La Ley Federal de Cinematografía, en el Articulo VIII desde 1992, hace ya casi treinta años, decía que las películas serán exhibidas en su idioma original y en su caso subtituladas al español, en los términos que establece el reglamento”. Recordamos bien los amparos que, de hecho, siguen vigentes por parte de la industria del doblaje y las exhibidoras. Ese lenguaje legal no ha cambiado y de ahí la confusión. Pero entonces, ¿qué cambió ahora?
La modificación al articulo en este momento es que específicamente todas las películas, sea cual sea su idioma original, incluyendo el español, serán subtituladas en nuestro idioma. No hay un ataque contra la (extraordinaria, por cierto) industria del doblaje, más bien lo que se está buscando es que quienes tengan cualquier problema auditivo “tenga acceso a sus derechos culturales”.
Lo que cambió, al menos ahora, es que habrá subtítulos. Nada más. Y tiene sentido, porque si todo esto es una situación en la que auténticamente se está tratando de hacer accesible el cine para todos, sería absurdo quitarle ese mismo derecho a quien en lugar de tener una debilidad auditiva, tenga una visual. Así que a escuchar y/o a leer. No es una por otra. No esta vez.