Una aplanadora imparable y un DT que no funciona
Hoy no voy a ahondar tanto en el tema. Ya lo he dicho desde la J-1 y sigo pensando lo mismo. No ahondaré, pero cada día que pasa, cada jornada y cada partido, reconfirmo más mi postura a cerca del Monterrey.
Para ser campeón no se necesita solamente ser el mejor, sino tener cierta dosis de suerte en 180 minutos y factores extras como expulsiones, autogoles, errores arbitrales y algunos otros más.
Por eso no se puede asegurar lo que va a pasar, pero una cosa distinta es sí asegurar quiééén es el candidato —de calle— para ser el nuevo monarca de México.
(Si digo “nuevo” es porque el Atlas ya no lo será). YahísíqueRayadosloes.Esel1aconseguirloporsu plantilla, por su equipo como tal y por su entrenador.
(Para los que criticaban la llegada de Víctor, ahí están los resultados de este gran DT. Tiempo al tiempo).
“Este equipo es el más fuerte. Ahora que volvió Aguirre no solo te hace más fuerte en la cancha, sino en lo mental. Nosotros mismos sentimos más seguridad de que anotaremos muchos goles cuando los de arriba están todos juntos y los que no estamos encargados de marcar hacemos mejor y más segura nuestra función en la cancha cuando nos toca jugar”, me dijo el domingo mi Judas Pandi.
Monterrey reúne todo para conseguirlo. Nadie como Rayados. Solo falta que esos factores que les comenté estén con ellos a la hora buena.
Y si no, volteemos a mayo del 2016, cuando el muy inferior Pachuca les ganó la Final a la aplanadora de Antonio Ricarda Mohamed Matijevich.
Tienen todo para ser campeones, más, más y más que los demás… pero falta ese golpe de suerte que se requiere, y eso lo veremos hasta el 1 de octubre cuando se juegue la Vuelta de la Final.
En el fondo, él no quería
La confianza interna que se tiene en Cruz Azul y en su DT es lo suficientemente fuerte como para aguantar más y más resultados malos en este torneo.
AfinesdejuliolescomentéqueladirigenciaCeleste confía plenamente en el trabajo del DT uruguayo Diego Aguirre, de reciente incorporación al equipo.
“Pase lo que pase creemos en su capacidad y en su trabajo. Lo apoyamos y respaldamos”.
Así me lo viene diciendo mi Judas Azul. No de ahora, sino desde antes que iniciara la Jornada 1, cuando él no sabía que les iría mal al inicio de la campaña.
Bueno, pues ayer platicamos un rato. Si me lees seguido, habrás notado que mis columnas se inclinan más por tenerte una información interna del equipo o personaje del que te hablo.