Milenio

Ya supérenlo

Todo salió a pedir de boca. Se ha demostrado que un concierto de música, buena, mala o regular, no importa, puede contribuir a la candidatur­a de Claudia Sheinbaum. ¿Todavía alguien duda que ella será la aspirante de Morena?...

- GIL GAMÉS Gil s’en va

Si alguien duda de que atravesamo­s días extraños, sólo tiene que seguir las huellas de las declaracio­nes de la jefa de Gobierno y del Presidente al referirse al concierto del Grupo Firme. Gil se pregunta: ¿por qué tendría que ser tan importante el sonido grupero en un Zócalo abarrotado hasta la bandera? Vamos a verlo de esta forma: los conciertos son la estructura de los pueblos; por lo mismo, Claudia Sheinbaum grabó un mensaje desde su oficina: qué bonito el Zócalo repleto, un gran triunfo, una victoria.

De ser así, todos los jefes de Gobierno de la ciudad e incluso los regentes del Distrito Federal han triunfado en los conciertos que han organizado. Morena y los suyos mienten hasta cuando dicen la verdad: qué gran momento histórico para la ciudad, un concierto; oyeron bien, un concierto de música grupera. Hagan ustedes de cuenta que el crecimient­o había llegado al 4%, como si la refinería Dos Bocas hubiera costado lo que dijeron que costaría, como si la insegurida­d hubiera disminuido notoriamen­te, como si la salud no fuera un campo devastado, como si la educación no fuera el páramo triste en que la han convertido. Y todo por la visión de una estadista que supo ver las grandes ventajas políticas de los conciertos. Este grupo de políticos y políticas son populistas hasta a la hora de escuchar música y bailar y defender las letras tontas producto de algún descerebra­do: “En sí las canciones no tienen un riesgo feminicida, puede uno estar o no de acuerdo con una letra, yo creo que ya correspond­e a las personas, nosotros no vamos a censurar, no estamos de acuerdo con la censura, el pueblo de México es responsabl­e y es adulto”. Mju, sí, como ño. Gilga considera en cambio que el pueblo reunido es capaz de tremendas infamias. Antes al pueblo le llaman masa, las masas.

Marchelo, ¿ya le cayó el veinte?; Adán, ¿ya sabía o de plano se le antojaba el jugo del poder?

Canciones de adversario­s

Gil no está de acuerdo con las canciones populares y debatirá armado de conceptos punzocorta­ntes. Por ejemplo: “espera un poco, un poquito más, para entregarte mi felicidad”, a todas luces una línea conservado­ra que pretende retrasar la cuarta transforma­ción; o esta otra: “es preciso decir una mentira, di que vienes de allá, de un mundo raro, que no sabes llorar, que no entiendes de amor y que nunca has amado ”, desde luego se refiere a esa letra extraña que impuso el neoliberal­ismo: mentir, un mundo raro, llorar, incomprens­ión del amor, pobre Gamés.

Dice la jefa de Gobierno y virtual precandida­ta de Morena a la Presidenci­a de la República (Gil anda destapando candidatos de fuste y fusta): “Realmente fue un concierto muy exitoso, maravillos­o, quiero decir, porque además se ha dicho en algunos medios y algunas personas que tuvo un gran costo para el gobierno de la ciudad, por eso agradecimo­s tanto al Grupo Firme porque en realidad ellos pusieron prácticame­nte toda la inversión”. La verdad se rifó el Grupo Firme, pagó por cantar y tocar. Una porra para el grupo Firme: ¡hip-hip-hurraa! Un concierto popular al que asistieron 280 mil personas, eso dicen, donde nadie cobró un peso. Ahora así se usa: usted se presenta y dice, se hacer cosas y no cobro un peso. Ah, aquí tenemos a un miembro distinguid­o de la transforma­ción. ¿Cómo la ven?

El pan y el hombre

Gilga se ha guardado para el final de esta página del fondo, la declaració­n superior del Presidente: “Una buena iniciativa de la jefa de Gobierno que logró reunir a unas 280 mil gentes, porque no sólo de pan vive el hombre”. Aclaremos algo, las 280 mil personas las reunió el Grupo Firme y no Claudia Sheinbaum, pero bueno, si quieren hacer un acto de campaña, háganlo, total. La jefa de Gobierno: “además de que se rompió el récord en asistencia con 280 mil personas, todos prácticame­nte jóvenes”. Fiuu. Todo salió a pedir de boca. Se ha demostrado que un concierto de música, buena, mala o regular, no importa, puede contribuir a la candidatur­a de Sheinbaum. ¿Todavía alguien duda que ella será la candidata de Morena? Marchelo, ¿ya le cayó el veinte?; Adán, ¿ya sabía o de plano se le antojaba el jugo del poder? Dicho lo cual, Gil se retira a estudiar a la selección mexicana de futbol. El cotejo frente a Colombia, muy importante. Vamos a ver.

Todo es muy raro, caracho. Como diría Eugène Ionesco: “Nadie es dueño de la multitud, aunque crea tenerla dominada”.

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