Los chairos son los violentos
El expresichente Jelipillo está bien entrenado en trollear un día sí y otro también contra la cuatroté (bueno, salvo cuando se le cae el wifi por culpa de García Luna Productions y la narcoguerra megafallida y mil 800 asuntos nocivos para la salud) que ahora se la hizo de jamón a los del KukluxPAN que, curiosa mente, olvidaron incluirlo en la campaña de aniversario de esa ala recalcitrante de Frenaaaa. Una campaña donde se exaltan de manera artística a los héroes blanquiazulinos con una estética de El libro vaquero y el Sensacional detrailer os. Pancho to to to to te el que armó Cal deRónan te tal afrenta( tiene paranoia al revés y cree que todo el mundo debería adorar lo) al darse cuenta de que Marki ti ti tito Cortés prefiere relacionar al PAN con elPRIyelPRD que con él, cuyosLiKEy RT arrasan con cualquier prestigio, incluso más que Álvarez Y Guasa.
Nada lo calentaba, por eso soltó a los bots más rabiositos de su cosecha especial; primero para defender al Raúl Velasco de la información, Yorch Ramos, y luego para exaltar los valores periodísticos de Peniley Ramírez en su afán por normalizar la lógica noticiosa del Alármala de tos. Y de paso entorpecer las investigaciones de la tragedia de Ayotzinapa. Fue tan inocente la filtración que hasta le sirvió a Gertz Manero para meterle la pata al fiscal Omar Gómez Trejo, encargado del caso de los 43 de Ayotzinapa. (E*l Tata Martino debería llevarse a Don Alex a Qatar,
Lo único que falta es que Jelipillo exija que lo pongan en la nómina de Latinus. ¿O ya estará?
para que filtre los pase sala olla que tanto le hacen falta alPRI, digo, al TRI.) Algo que también aprovecharon los iracundos que con los ojos inyectados de sangre, exigen que caiga Alejandro Encinas (los paleros de Alazraki andan en tachas) y que el Batiburillo Karam sea declarado héroe nacional.
Al final le dieron por su lado a Jelipillo, pues temieron que se pusiera peor que el papá de Mauricio Tabe, alcalde panista en Miguel Hidalgo, que amenazó con un cuchillo cebollero —mejor hubiera sacado el cuchillito de palo— al funcionario que estaba clausurando su taquería solo para demostrar que los cha ir os son los violentos. Así, la apolínea efigie de Calderón apareció en los pósteres conmemorativos que deben tener vuelto s lo cosa los coleccionista s de ondas pinochetistas; lo que no entendí fue por qué los diseñadores me lo dejaron igualito a Ricardo Anaya.
Ya lo único que falta es que el expresichente Jelipillo exija que lo pongan en la nómina de Latinus para que se ponga contento. ¿O ya estará?