Tragedias en el aire
La mayoría de las escuelas de aviación ubicadas en el Estado de México, carecen de protocolos especiales para accidentes
TOLUCA, Méx.- Las rutas aéreas que cruzan el Estado de México cuantifican en cinco años y medio al menos 10 accidentes de aeronaves pertenecientes a escuelas de aviación. Del listado de tragedias, en siete hubo pérdidas humanas, quienes fallecieron calcinadas o por las lesiones causadas durante el desplome. El último caso ocurrió el domingo 20 de mayo en los terrenos del Aeropuerto Internacional de Toluca, donde la aeronave quedó llantas hacia arriba sin que hubiera lesionados.
Mientras que el viernes 4 de mayo en el poblado de San Diego Buenavista, municipio de Almoloya de Juárez, el piloto y su copiloto hicieron un aterrizaje forzoso luego de salir del Aeropuerto Internacional de Toluca con destino a Mazatlán, Sinaloa.
ESCUELAS OMITEN PROTOCOLOS
Pese a los altos costos para carreras técnicas en las escuelas de aviación con domicilio en Toluca, la mayoría no cuenta con protocolos especiales para casos de accidentes.
Mediante una consulta hecha en varios planteles, se obtuvo que una carrera para Pippers son los aviones más siniestrados
técnico en mantenimiento de aeronaves y de oficial de operaciones, tiene un costo superior a los 50 mil pesos.
La duración en general es de cinco meses con un tiempo de práctica en vuelos, en cursos semanales que implica una serie de exámenes físicos y sicométricos, en los que se revisan sangre, oídos, peso, vista y corazón.
Pero en la información solicitada las escuelas omiten información sobre los protocolos y seguros de vida en caso de accidentes.
Las escuelas consultadas revelaron que además de la carrera técnica, los interesados en volar deben ingresar a otro curso, donde se consideran 300 horas de vuelo, con un precio de tres mil pesos por hora.
ESCUELAS Y SANCIONES
Actualmente en la entidad existen 29 escuelas destinadas al adiestramiento y capacitación aérea, y de las cuales sólo a una se le ha retirado su permiso de funcionamiento en los últimos años, según información proporcionada por la Dirección de Aeronáutica Civil de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT).
Mediante una solicitud de información hecha por este diario, el área precisó que se hace una vigilancia permanente de dichos centros de adiestramiento mediante el Programa Anual de Verificaciones, con el que se constata que la prestación de estos servicios se haga con las medidas de seguridad suficientes.
De acuerdo con la dependencia, se ha establecido un Programa de Inspecciones en Rampa, dirigido a vigilar el nivel de seguridad de las aeronaves en el momento de su operación.
“Se tiene la revisión del mantenimiento de las aeronaves utilizadas para este tipo de servicio, que conlleva al otorgamiento/revalidación del certificado de aeronavegabilidad”, precisa la SCT.
Pese a que en los últimos cinco años se cuantifican al menos nueve accidentes de aeronaves pertenecientes a escuelas de aviación, la Dirección General de Aeronáutica aclaró que no existen sanciones a los centros de adiestramientos por dichas circunstancias.
“No se tiene registro de sancionar o no; lo cual dependerá de la terminación del proceso de investigación/dictaminación de un accidente aéreo, y en cuyo caso, se haya identificado alguna desviación o incumplimiento a la normatividad aeronáutica”, informó el área en la petición de información.
Asimismo, dijo que el ciclo de vida de una aeronave está sujeto a la correcta aplicación en tiempo y forma del programa de mantenimiento (preventivo y correctivo) del fabricante de la aeronave.
XINANTÉCATL
La tarde del 13 de febrero de 2012 cayó una aeronave de prácticas en la zona baja del volcán Xinantécatl en territorio del municipio de Temascaltepec. Según los reportes de aquel entonces, el auxilio se solicitó al paraje conocido como La Loba, pero al llegar solo se pudo rescatar al piloto,
mientras que una menor de 17 años de edad falleció.
Otro incidente similar y en la misma zona, ocurrió el 20 de marzo del 2016, con saldo de dos personas muertas. Las labores de rescate duraron varios días, pues la aeronave cayó al interior de un cráter en el llamado Pico del Águila.