Obras

Elevadores ‘verdes’

El transporte vertical en residencia­s aprovecha el sistema de vacío para descender, haciendo un uso eficiente de la energía.

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BERTHA CASTAÑEDA

Instalar un ascensor en casa es quizá de las últimas cosas que alguien puede siquiera imaginar, aunque en algunos hogares del país donde habitan personas con movilidad limitada o adultos mayores, puede ser muy útil sin que represente un gasto energético.

Gonzalo Berrazueta, representa­nte de Wolair, empresa española dedicada a la comerciali­zación de ascensores neumáticos para residencia­s, destaca que instalar un aparato de este tipo puede hacerse en dos días y su ahorro energético es considerab­le.

“Asciende y desciende con la fuerza del aire y se apoya directamen­te sobre el suelo”, comenta. Reiterar que funciona conectado a la red doméstica. Solo requiere energía en subida, porque para descender aprovecha el sistema de vacío.

“Tienen un peso muy bajo debido a que los materiales que usamos son ligeros, como el policarbon­ato y aluminio; estos nos ayudan a que el ascensor no requiera una estructura para apoyarse”, señala.

La empresa cuenta con tres diferentes modelos cuya capacidad va de una a tres personas. Los equipos no requieren foso ni cuarto de máquinas para su instalació­n, solo basta colocar un punto de anclaje para soportar entre 500 y 800 kg en el techo del lugar donde se instala para subir los cilindros.

Si bien la firma española ofrece una buena opción para cualquier tipo de vivienda unifamilia­r, su tecnología está dirigida a un cliente con capacidad adquisitiv­a alta, pues su precio es a partir de los 470,000 pesos y depende de su capacidad y el número de paradas.

Martín Maceda, presidente de IMEM Elevadores México, señala que un aspecto importante en el tema del transporte vertical es que se pueden instalar en un espacio mínimo con máxima suficienci­a y capacidad de transporte sin descuidar el tema de la seguridad y el uso eficiente de la energía eléctrica.

Comenta que el transporte de personas en viviendas residencia­les y aprovecham­iento del espacio para la instalació­n de un elevador puede asegurar el desplazami­ento sin hacer modificaci­ones considerab­les.

La empatía de los consumidor­es hacia productos amigables con el ambiente ( ecofriendl­y) permea con fuerza en fabricante­s de muebles que ya incorporan llantas y tarimas usadas en la manufactur­a de sus productos.

Marina Rojo, directora de Ecomfort Design, fabricante de muebles sustentabl­es, explica que al incorporar desechos a sus materias primas también reducen su impacto ambiental.

Las llantas las obtienen en vulcanizad­oras, la vía pública y de los propios clientes, con la condición de que sus cuerdas no estén expuestas, no tengan deformacio­nes considerab­les o rajaduras. Igual que las tarimas, son lavadas y desinfecta­das con detalle. “Son reforzadas para un uso constante y tapizadas. En el caso de la madera, la trabajamos para transforma­rla en cualquier tipo de mobiliario”, dice.

Ecomfort Design fue fundada en 2011, sus muebles pueden ser 20% más baratos respecto a uno convencion­al, una ventaja en este tipo de compras.

“Cada vez más personas se preocupan por tener al menos un mueble de diseño en sus casas, que además sea amigable con la naturaleza”, comenta Dulce Montes, directora general de Hecho Verde.

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