Apuesta por el reúso
A partir de la reutilización del cascajo, así como de desechos orgánicos, será posible construir suelos artificiales en la Ciudad de México, señala Bruno Manuel Chávez Vergara, investigador del Instituto de Geología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
El responsable técnico del proyecto explica que la construcción de estos suelos, en especial de las áreas verdes, podría ser una alternativa para el manejo de residuos, mantener el crecimiento vegetal, funcionar como almacén de carbono, filtrar agua de lluvia, así como restaurar suelos contaminados.
El trabajo del Instituto de Geología de la UNAM, financiado con 2,788,000 pesos por la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Ciudad de México (Seciti) pretende aportar conocimiento científico y tecnológico, y recuperar funciones ecosistémicas.
El desarrollo del proyecto se encuentra en fase de invernadero a pequeña escala, en donde se trabaja con parcelas de 1.50 μ 1.50 metros, donde se emplea cascajo y composta derivada de residuos de jardinería y orgánicos provenientes del Bordo Poniente.
A su vez, Bernardino Rosas Flores, director de Desarrollo Científico y Tecnológico de la Seciti, señala que el trabajo prevé la utilización de tres áreas verdes perturbadas en las que se puedan probar y monitorear los suelos artificiales.
De acuerdo con la dependencia capitalina, en la Ciudad de México se generan alrededor de 6,500 toneladas de residuos minerales al día, producto de excavaciones y demoliciones.