El capital encriptado
Las criptomonedas llegan a proyectos de bienes raíces y urbanismo con la promesa de transparentar el flujo de capital para transacciones y financiamiento.
Las criptomonedas podrían ayudar a transparentar las transacciones del sector.
La compraventa de un terreno, el control catastral y la generación de datos estadísticos de los consumidores con posibilidad de comercializarlos son algunos ejemplos de operaciones que podrán efectuarse con City Coin, una criptodivisa respaldada por Seratio —plataforma lanzada en octubre de 2017 mediante una oferta inicial por la Universidad de Northampton, en Inglaterra— que busca convertirse en un medio de pago complementario para transacciones relacionadas con el urbanismo.
“Con esta moneda complementaria podemos trabajar los valores urbanos en términos de plusvalía, de transferencia de derechos y hasta de desarrollo de las ciudades”, explica su promotor Alfonso Govela, fundador de Digitalcivix.
Para Karl Rieder, chief operating officer de GFT en México, consultora de tecnologías de la información, existen diversos proyectos en proceso debido a que el uso de estos sistemas permite abatir la desconfianza de los usuarios, los altos costos y retrasos en el procesamiento efectuado por varias entidades y los manejos inadecuados o ilegales, además de brindar mayor seguridad a las transacciones y operaciones.
“Actualmente hay varias aplicaciones en proceso de prueba en el mundo financiero y de bienes raíces que a futuro permitirán que un mayor número de personas tenga acceso a los servicios de la banca, así como que disminuyan costos y tiempos de transacción”, asegura Rieder.
Sin intermediarios
Al respecto, Alberto Azpúrua, chief executive officer de Bricks Asset Management, explica que la empresa lanzó recientemente Brickspool, Fibra que permite realizar inversiones en bienes raíces, principalmente en Florida, Estados Unidos.
“El funcionamiento es sencillo: el inversionista compra ethers en su monedero Ethereum ( plataforma lanzada en 2015 que maneja volúmenes de intercambio diarios cercanos a los 1,000 millones de dólares); con ellas nos paga los activos de real state, nosotros las transformamos a dólares y compramos más propiedades”, explica Azpúrua.
De acuerdo con el ejecutivo, lo novedoso es que este instrumento elimina intermediarios, como las casas de bolsa, y permite hacer transacciones de manera más rápida y segura.
Según el reporte Estrategia Global 2018, emitido por CG/ LA Infraestructure, las criptomonedas tienen un gran potencial y están transformando el mercado global de la infraestructura. “Buildcoin no es solo una moneda, es la creación de un ecosistema digital amplio y profundo que proporciona mayor transparencia e inclusión, y una transferencia de valor más eficiente a través de la cadena de suministro de infraestructura”, revela.
El uso de criptomonedas —ya sea para la construcción, el mercado de bienes raíces u otro tipo de operaciones— está basado en la tecnología llamada blockchain, una plataforma de información y transacciones que no se pueden modificar debido a que están encriptadas con un código de registro único conocido únicamente por los involucrados.
Criptografía
Este sistema funciona como un libro de registros, ya sea de base de datos, eventos, activos, transacciones, entre otros, que se realiza mediante una plataforma tecnológica que puede ser pública o privada.
Los usuarios realizan alguna transacción que va desde la compraventa hasta el registro de algún documento de propiedad, incluso la emisión de un comprobante de domicilio que se sube a la plataforma, luego de ser validado por un tercero se registra mediante un código encriptado; es decir, no puede ser modificado excepto por quien tiene el número, explica Daniel Vega, director de Asesoría en Administración de Riesgos Financieros de la consultora KPMG en México.
“Cuando se realizan transacciones con dinero electrónico registrado en cada uno de estos bloques, se empieza a crear valor y demostrar que se puede transaccionar dinero de forma segura. El sector de bie- nes raíces es uno de los que más se beneficiará de ello”, comenta George Levy, chief learning officer de Blockchain Institute of Technology.
Al respecto, Alberto Laris, socio y director comercial de la constructora Gaya, opina que el tema de las criptomonedas es algo disruptivo. Aunque en México aún no tiene regulación, “nos encontramos en proceso de entender en qué consiste, analizando sus posibles implicaciones en la construcción (tanto de edificación como de interiores) a corto y mediano plazos”.
Al día del cierre de esta edición existían más de 1,500 criptomonedas. No obstante el desplome en valor que han tenido en los últimos meses, algunos expertos les auguran solidez a futuro.
Este comportamiento se asemeja al que tuvieron las ‘puntocom’ hace dos décadas, en el que algunos gigantes actuales del ecommerce parecían tener caídas abruptas, lo cual era parte de la consolidación, analiza Joseba Lekube, director de Teknei, proveedora de soluciones informáticas.
Para Lekube, “dado que estas plataformas permiten dividir los montos de inversión en cantidades pequeñas, cualquier persona podrá invertir en bienes raíces o podrá vender su propiedad de manera inmediata, lo cual es una gran revolución”.
Ante el auge de las monedas criptográficas, el pasado 7 de diciembre la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, el Banco de México y la Comisión Nacional Bancaria y de Valores emitieron un comunicado para “advertir los riesgos asociados al uso de activos virtuales y la participación en esquemas de inversión conocidos como Oferta Inicial de Monedas”, una opción de crowdfunding.
Parte de la certidumbre en estos instrumentos se espera que ocurra con la Ley Fintech y las normas secundarias. Mientras tanto, son un terreno que se debe explorar bajo riesgo propio.