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Ayer comen]ó el juicio a -oa quín µ(l &hapo¶ *u]mán en la &orte )ederal de %roonlyn, en el meritito 1ueva <orn. &uentan que varios agentes gringos del )%,

y 8S 0arshall andaban como si tu vieran paperas tienen miedo en realidad pánico a que el chapa rrito sinaloense se les escape por entre las piernas o haciendo un tú nel desde el baño de 0c'onald¶s. (l traslado de la cárcel al ju]gado iue como en película de /a 5oca µ(l &hapo¶ en chaleco antibalas dentro de un camión blindado, en convoy policiaco rodeado de pa trullas y helicópteros vigilando el trayecto. ,gualito a cuando sale de fiesta el hijo de algún líder del sindicato petrolero. &reo que has ta el Hombre Araña iba cuidando al jeie del &ártel de Sinaloa.

8na ra]ón por la que el jui cio genera tanto interés, es por saber si µ(l &hapo¶ tomará el micróiono y cantará como bo rracho en Naraone o se quedará calladito. Obviamente, todo mundo quiere que revele qué iuncionarios son sus cómplices, a quiénes tenía a sueldo, cuánto les pagaba, con qué gobernantes pactó, con cuáles gobernadores se llevaba de piquete de ombligo y con cuáles procuradores tenía más amarres que una bruja.

'ado lo delicado de lo que se va a hablar en el juicio, está pro hibido meter cámaras y grabado ras, además de que el jurado iue seleccionado de manera secreta y nadie conoce a quienes deci dirán si µ(l &hapo¶ es inocente o culpable de los delitos de tráfico de drogas, contrabando, lavado de dinero y asesinato. 3ero esta columna no puede dejar en las sombras a sus lectores, ¡ni que iuera la compañía de lu] (s por eso que aquí te traigo la única y verdadera transcripción de lo que se dijo en el juicio del siglo.

),S&A/ Señor jue], venimos ante usted para denunciar los de litos de asesinato, lavado dinero y tráfico de drogas. ¡Hoy veni mos a denunciar a un monstruo

-8(= 0uy bien, ¢quién es el acusado de este monstruicidio"

&HA3O <o mero, míster.

-8(= ¢¢¢&ómo que míster""" Soy el honorable jue]. 3uede lla marme ³su señoría´.

&HA3O ¡Ah, órale (s como lo vi con la bata blanca, pen sé que era el de la estética de %everly Hills que pedí que me trajeran para cortarme el cabe llo. 0ire nomás estos pelos, su sangría, ¢así cómo quiere que me dé lo suyito la .ate del &astillo"

-8(= ¡(s su señoría

&HA3O 1¶hombre, míster, ojalá la .ate iuera mi señoría. 0e coniormo con que sea mi novie cía. <a de perdida, mi iriguaiiai. (s más con que me diera un besi to en el coche, estaría yo contento.

-8(= 1o le entiendo nada de lo que dice. A ver, señor fiscal, ¢cuáles son los cargos"

),S&A/ Acusamos al señor *u]mán /oera...

&HA3O 'ime &hapito.

),S&A/ ¡4ue no Acusamos al señor *u]mán /oera de haber cometido el delito de crear todo un imperio criminal para meter toneladas de drogas, principal mente cocaína y mariguana en (s tados 8nidos de 1orteamérica.

&HA3O ¡0omentito

-8(= Se dice ³objeción´.

&HA3O Sí, sí, objeción porque el fiscal se está pasando de ojete. A ver, señor jue], si yo lo invito a comer a mi casa, usted llega, yo le abro la puerta, lo invito a pasar, le sirvo una cubita y unas jícamas con chilito, ¢lo puedo denunciar por haber invadido mi propiedad"

-8(= ¡Obviamente no

&HA3O (ntonces yo soy ino cente, míster jue]. 3orque yo no traje la droga a iuer]a. A mí me invitaron ustedes, los gringos, me abrieron la puerta y hasta me pa garon y muy bien por toda la dro ga que les traje. ¢<o los obligué" Obvio, no. Sí, yo la trafiqué, pero es porque ustedes la consumen.

-8(= ¡¡¡,nocente

),S&A/ 3ero, pero...

-8(= ,nocente, dije. Ahora móchese, don &hapo.

¡1os vemos