Amenaza extender aranceles
El presidente de EU, Donald Trump, aseguró ayer que está “listo” para llevar el enfrentamiento comercial con China al máximo, aplicando aranceles a todos los bienes que llegan del otro lado del Pacífico. Pero al mismo tiempo admitió que la fortaleza del dólar le complica ganar la batalla.
Aseguró que Beijing manipula su divisa para aliviar las restricciones, una acusación que extendió a la Unión Europea. Y en su frustración criticó también a la Reserva Federal, el banco central de EU, por crear una ventaja a su competidor subiendo los tipos de interés.
“Estoy listo para ir a 500”, afirmó el republicano en una entrevista emitida ayer por la cadena financiera CNBC.
Se refiere al déficit de 505 mil 500 millones de dólares que el Mandatario asegura que su país tiene en la balanza de bienes con China.
“Se aprovechan de nosotros”, lamentó, “y eso no me gusta. Desde hace años no me gusta”. En la conversación señaló también que el valor del yuan, la moneda china, “cae como una roca”. Después, en Twitter, dijo que manipula su divisa.
La devaluación de una moneda permite a un país hacer sus exportaciones más competitivas en el mercado internacional. Es de sobra conocido que Donald Trump es un político atípico, por su estilo. Pero sus dos predecesores, Barack Obama y George Bush, se resistieron a nombrar oficialmente a China como país manipulador de divisa.
La afirmación, además, es inusual porque el inquilino de la Casa Blanca suele tradicionalmente tomar distancia al valorar la política de cambio.
“El dólar se refuerza y se refuerza cada día que pasa”, insistió, “llevándose nuestra ventaja competitiva”.