#CONFIDENCIAL

Miguel Ángel Mancera,

jefe del gobierno de la Ciudad de México, deberá sacar la chequera para asumir los gastos que se deriven de la logística y asesoría que requieren los diputados de la Asamblea Constituyente, que redactarán la primera Constitución de la capital del país. Nos aseguran que en los próximo días los integrantes de la Mesa Directiva del Constituyente irán a la oficina de Mancera, incluso podrían tocar la puerta de Los Pinos, para pedirles que asuman los gastos que erogan los 100 asambleístas. GıÜČÿÝÑÝÿėĒåĨ 7åĮĤėġėČÿĮÑĒÑĨ Nȩ ȩ áå ȩ_ȩ Ʉ

César Duarte y Roberto

Borge, ex gobernadores del PRI en Chihuahua y Quintana Roo, están rezando para que nadie se acuerde de ellos y se los ocurra llamarlos a rendir cuentas y es que cuando uno pregunta al interior del PRI sobre el paradero de los ex mandatarios, nadie sabe nada; nadie los ha visto. Tal vez si las nuevas autoridades quieren buscarlos tendrán que ir al sur de Estados Unidos, como es el caso de Texas o Miami, donde parece que le gusta vivir a los políticos mexicanos que están en problemas. Aurelio Nuño, secretario

de Educación, ya tiene en la mano una lista muy amplia de maestros sustitutos que enviará a todas las escuelas en donde se ha empezado a cesar a los docentes por faltas o por no aprobar la certificación. Nos aseguran que Nuño pidió una pausa en el cese de profesores hasta que no se tuviera completo un nuevo registro de profesores nuevos. Así, en el momento en que dan de baja a un maestro que no cumple con los requisitos de la nueva reforma educativa, se envía a un profesor nuevo, al cual, de paso, no están dejando acceder a las escuelas. El conflicto sigue.

Luis Miranda, secretario

de Desarrollo Social, tiene saturada la agenda los próximos dos meses con invitaciones de gobernadores que le piden entregar becas, programas sociales diversos o simplemente participar en el arranque de políticas públicas. Nos aseguran que el tema de fondo es que hubo una petición desde la Presidencia a los gobernadores para arropar a Miranda quien apenas empieza con la tarea titánica de ofrecer discursos, de relacionarse con la prensa, de responder preguntas de coyuntura y de andar entre mares de personas.